Cadáver exquisito

Cadáver exquisito

Sinopsis

Cadáver exquisito es una obra dirigida por Rennier Piñero e interpretada por Katur Bejarano, Gustavo Chaidez Herrera, Martin García Fierros, Mariana Licon, Viviana Lugo, Carlos Murguía, Edna Muñoz, Carlos Valencia, Abigail SantoscoyOrlando Villanazul.

SINOPSIS

En 1993 Kevin Carter tomaba a las afueras de un campo de ayuda humanitaria de la ONU en Sudán, una de las fotografías más representativas del fotoperiodismo del siglo XX, una ‘niña’ moribunda con un acentuado cuadro de desnutrición es acechada por un buitre. Los veinte minutos de espera que pasó el fotógrafo frente a este cuadro para realizar la mejor foto, es el punto de partida de este Cadáver Exquisito.

Tras la publicación de la foto, Carter soportó duras críticas y acusaciones que fueron un motor fundamental en su camino hacia el suicidio. Con su imagen se desplegaba nuestra compasión y caridad y con su muerte, acaso, se calmaba nuestra ira y quizás se acallaban las conciencias.

Una pieza que parte del teatro como documento y que despliega la fábula desestructurada en torno a la foto y su autor, desde un lenguaje que fluye a la poetización del discurso. Cadáver Exquisito nos pone frente a frente con la cara más política del teatro, justo cuando en muchos foros del arte se debate sobre si esta ‘interpretación’ política del arte es o no adecuada.

Sinopsis

Cadáver exquisito es una obra dirigida por Rennier Piñero e interpretada por Katur Bejarano, Gustavo Chaidez Herrera, Martin García Fierros, Mariana Licon, Viviana Lugo, Carlos Murguía, Edna Muñoz, Carlos Valencia, Abigail SantoscoyOrlando Villanazul.

SINOPSIS

En 1993 Kevin Carter tomaba a las afueras de un campo de ayuda humanitaria de la ONU en Sudán, una de las fotografías más representativas del fotoperiodismo del siglo XX, una ‘niña’ moribunda con un acentuado cuadro de desnutrición es acechada por un buitre. Los veinte minutos de espera que pasó el fotógrafo frente a este cuadro para realizar la mejor foto, es el punto de partida de este Cadáver Exquisito.

Tras la publicación de la foto, Carter soportó duras críticas y acusaciones que fueron un motor fundamental en su camino hacia el suicidio. Con su imagen se desplegaba nuestra compasión y caridad y con su muerte, acaso, se calmaba nuestra ira y quizás se acallaban las conciencias.

Una pieza que parte del teatro como documento y que despliega la fábula desestructurada en torno a la foto y su autor, desde un lenguaje que fluye a la poetización del discurso. Cadáver Exquisito nos pone frente a frente con la cara más política del teatro, justo cuando en muchos foros del arte se debate sobre si esta ‘interpretación’ política del arte es o no adecuada.

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