El canto del cisne de Antón Chéjov toca temas que siguen siendo relevantes: la soledad, el paso del tiempo, lo efímero de la fama, la vanidad, la importancia de separar la vida pública de la privada y conocer los límites que tiene cada una. Este espectáculo forma parte de la programación del Festival de Teatro Stanislavsky.
Sinopsis
Un anciano actor, Vasily Vasilyevich Svetlovidov, se queda dormido tras una función benéfica en su honor y se despierta borracho en el teatro totalmente vacío. Entre sueños y recuerdos comienza a hacer un repaso a lo que ha sido su vida y en qué se ha convertido.
Svetlovidov se ha sacrificado por el teatro porque tiene talento y una auténtica vocación escénica, pero por el camino han surgido decepciones y, sobre todo, un amor no correspondido que le han hecho perder la ilusión y la fe en sí mismo, tanto como actor como persona. La lucha entre su carrera profesional y su vida personal le ha llevado a la soledad y la desesperanza.
Los límites entre la fantasía del teatro y la realidad se desdibujan para Svetlovidov que vive su vida exclusivamente por y para el teatro y sus personajes. Pero a pesar de la magía, el encanto y la ensoñación que crea el teatro, también existen carencias como una mujer o unos hijos que le quieran, y que sólo puede suplir la realidad.
La soledad y el olvido que sufre el actor se ven compensados en parte por el legado artístico que deja atrás y que permanece siempre vivo. El apuntador, Nikita Ivanich, actúa como el guardián de dicho legado y, a la vez, la conciencia del propio Svetlovidov.

