Sinopsis
Escrita por Cristina Redondo y dirigida por Laura Ortega, Intemperie es la historia de un amor mal entendido, de la dulce venganza de quien no ha podido reconstruir su vida, de la intemperie de dos hermanos que se abrazan y se empujan.
SINOPSIS
Anochece. En el lujoso ático de Nita las luces se vuelven artificiales. Su hermano le ayuda a preparar la mesa cubierta de platos, comida, copas, cubiertos… Todo es aparentemente hermoso. Todo es aparentemente feliz. Hace 13 años que no se ven, los hermanos se cuentan la vida poco a poco. Se ríen, se rozan, se abrazan, cocinan juntos, se miran intentando reconocerse. Jhonny no sabe o no quiere saber.
–¿Habrás tenido una buena razón para mandarlo todo a la mierda?
–Lo importante, en este punto, es saber por qué estoy aquí.
Nita sonríe como las griegas en sus mosaicos. Nita es pétrea, contundente, incisiva. Jhonny es carne, vísceras, violencia.
La familia está por llegar, lo hará dentro de nada. Nita sabe que tiene poco tiempo para alcanzar el límite, mirar al otro lado y dejarse caer. Durante ese tiempo de espera todo está orquestado, los hermanos se dirigen hacia un estado de intemperie, sin techo ni reparo alguno. Poco a poco irán recordando su infancia marcada por la presencia del tío Lucas, el hombre fuerte de la familia que dirigía los destinos de sus miembros. El padre, boxeador de vocación; la madre, silente y adormecida en su rutina; y los otros que como títeres no supieron mirar lo que estaba pasando entre los hermanos. Solo el tío Lucas, que echó a Nita de casa para protegerla del amor de su hermano. Jhonny parece que no recuerda nada, tal vez ni siquiera supo que aquello no estaba bien.
Castellano
Escrita por Cristina Redondo y dirigida por Laura Ortega, Intemperie es la historia de un amor mal entendido, de la dulce venganza de quien no ha podido reconstruir su vida, de la intemperie de dos hermanos que se abrazan y se empujan.
SINOPSIS
Anochece. En el lujoso ático de Nita las luces se vuelven artificiales. Su hermano le ayuda a preparar la mesa cubierta de platos, comida, copas, cubiertos… Todo es aparentemente hermoso. Todo es aparentemente feliz. Hace 13 años que no se ven, los hermanos se cuentan la vida poco a poco. Se ríen, se rozan, se abrazan, cocinan juntos, se miran intentando reconocerse. Jhonny no sabe o no quiere saber.
–¿Habrás tenido una buena razón para mandarlo todo a la mierda?
–Lo importante, en este punto, es saber por qué estoy aquí.
Nita sonríe como las griegas en sus mosaicos. Nita es pétrea, contundente, incisiva. Jhonny es carne, vísceras, violencia.
La familia está por llegar, lo hará dentro de nada. Nita sabe que tiene poco tiempo para alcanzar el límite, mirar al otro lado y dejarse caer. Durante ese tiempo de espera todo está orquestado, los hermanos se dirigen hacia un estado de intemperie, sin techo ni reparo alguno. Poco a poco irán recordando su infancia marcada por la presencia del tío Lucas, el hombre fuerte de la familia que dirigía los destinos de sus miembros. El padre, boxeador de vocación; la madre, silente y adormecida en su rutina; y los otros que como títeres no supieron mirar lo que estaba pasando entre los hermanos. Solo el tío Lucas, que echó a Nita de casa para protegerla del amor de su hermano. Jhonny parece que no recuerda nada, tal vez ni siquiera supo que aquello no estaba bien.
- Dirección:
- Dramaturgia:
Cristina Redondo - Escenografía:
Mónica Boromello - Iluminación:
Daniel Alcaraz Bonmatí - Sonido:
Miguel Ángel Burgos - Movimiento:
KOR'SIA - Diseño gráfico:
Pablo Silva Glez. - Producción:
Trueba & Trueba
Spectare Producción Creativa