La gente no cambia… disimula es un espectáculo concebido por dos desvergonzados cubanos que dicen ser actores y trovadores. Tratan de adentrarnos en la historia de la colonización española a Cuba, la herencia en el sexo y la picardía costumbrista.
En este viaje contrastado se sirven de humor, la música, la poesía y la reflexión para hacernos disfrutar y emocionar.