La Marquesa Rosalinda, de De Periplo Teatro, es un divertimento en forma de farsa, que preludia los personajes esperpénticos que harán inmortal al gran Valle-Inclán. Una comedia de enredos amorosos, no exenta de sátira mordaz, que transciende la crítica a la sociedad de su tiempo. En el Teatro Real Carlos III de Aranjuez.
Sinopsis
Rosalinda está casada con el Marqués d’Olbray, rico, viejo y francés. Acostumbrada a sus juegos amorosos en la corte, al modo de Francia, permitidos por su liberal marido, se encuentra perdida cuando se siente enamorada de Arlequín, regidor del carro de la farándula, que llega a Aranjuez junto a sus compañeros de la Comedia del Arte, Colombina, Polichinela y Pierrot.
Encuentros y desencuentros, malentendidos y juegos amorosos, se desarrollan en los jardines palaciegos del Aranjuez de la corte decadente de Felipe V e Isabel de Farnesio, a la luz de una luna que espía todos los movimientos: Arlequín enamorando a la marquesa, Rosalinda enamorada y pretendiendo huir con los farsantes, Colombina celosa, la preparación de la boda de Doña Estrella, la hija de Rosalinda y el Marqués, dos sicarios del marqués persiguiendo a Arlequín, una consuegra, terrateniente andaluza, dicutiendo las arras de la boda, la magia de los jardines, los cisnes, los ruiseñores y las rosas. Y el encanto grecolatino de sus estatuas y fuentes. Aranjuez como retiro primaveral de la corte borbónica de Madrid.