La voz y la herida no es un drama: es un acto de vida. Una obra que celebra la resistencia de quien descubre cómo el arte sana, cómo las heridas respiran y cómo cada grieta nos recuerda que seguimos vivos, haciéndonos más resistentes y mejores personas.
Sinopsis
Finito y Keroseno se muestran sin máscaras para compartir sus cicatrices con humor, música y verdad. No cuentan una historia lineal, sino fragmentos que mezclan recuerdos y risas, ternura y momentos difíciles.

