Le Cirque Invisible. Festival Internacional de Artes Escénicas

Le Cirque Invisible. Festival Internacional de Artes Escénicas

Tras más de medio siglo dedicándose al mundo del circo, Victoria Chaplin, la tercera hija del legendario Charles Chaplin, y su marido, Jean Baptiste Thierree, siguen sorprendiendo y emocionando al público de cada país que visitan con Le Cirque Invisible, un espectáculo que combina elementos del circo más tradicional con innovadoras sorpresas.

Sinopsis

En palabras de los propios Jean-Baptiste Thierrée y Victoria Chaplin: Presentar Le Cirque Invisible es muy sencillo: el programa de mano tendría que ser una hoja en blanco. Invisible es la sombra de lo visible, es su complemento. Para crear este espectáculo, primero hemos tenido que matar al viejo Le Cirque Imaginaire, que representamos durante más de diez años en las mismas ciudades, delante del mismo público, a la misma hora del día. Podríamos haber continuado representándolo durante el resto de nuestras vidas y por todos los continentes, sin cambiar nunca nada. De lo imaginario a lo invisible, sólo hay un paso a través del espejo. No somos personas que hablemos mucho de nosotros mismos: durante diez años no hemos participado nunca en una rueda de prensa, simposium, ni entrevista… hemos estado en silencio.

¿Habríamos de comenzar ahora a hablar de nuestro trabajo? ¿Habríamos de dar a conocer ahora nuestras intenciones? Le Cirque Imaginaire era un divertimento siempre difícil de escribir y de explicar, Le Cirque Invisible aún lo es más. Creció como un árbol de imágenes, sus hojas son de todas las estaciones, de todo el tiempo. Sus ramas se queman, se congelan, florecen y se deshacen en polvo…”

Duración:
Edad:
A partir de 8 años
Sinopsis

En palabras de los propios Jean-Baptiste Thierrée y Victoria Chaplin: Presentar Le Cirque Invisible es muy sencillo: el programa de mano tendría que ser una hoja en blanco. Invisible es la sombra de lo visible, es su complemento. Para crear este espectáculo, primero hemos tenido que matar al viejo Le Cirque Imaginaire, que representamos durante más de diez años en las mismas ciudades, delante del mismo público, a la misma hora del día. Podríamos haber continuado representándolo durante el resto de nuestras vidas y por todos los continentes, sin cambiar nunca nada. De lo imaginario a lo invisible, sólo hay un paso a través del espejo. No somos personas que hablemos mucho de nosotros mismos: durante diez años no hemos participado nunca en una rueda de prensa, simposium, ni entrevista… hemos estado en silencio.

¿Habríamos de comenzar ahora a hablar de nuestro trabajo? ¿Habríamos de dar a conocer ahora nuestras intenciones? Le Cirque Imaginaire era un divertimento siempre difícil de escribir y de explicar, Le Cirque Invisible aún lo es más. Creció como un árbol de imágenes, sus hojas son de todas las estaciones, de todo el tiempo. Sus ramas se queman, se congelan, florecen y se deshacen en polvo…”

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