Pongamos que no hablo, en Madrid es un formato de improvisación gestual fruto de la creación conjunta en la que se lleva al espectador a viajar de un lugar a otro de la ciudad, sin palabras. Porque Madrid habla por sí sola.
Sinopsis
Madrid es la ciudad que nunca duerme y en la que suceden infinidad de historias. Lugares llenos de gente, recuerdos emocionantes o anécdotas curiosas serán los estímulos para la creación colectiva de historias improvisadas sin palabras.