El color es el gran protagonista de esta sencilla historia de títeres, que se desarrolla en un circo en el que Olej quiere cumplir su sueño de ser mago. No lo va a tener fácil porque tiene que abrirse camino entre sus grandes estrellas: malabaristas, payasos y equilibristas que, desde el primer momento, atrapan al espectador con sus habilidades circenses y números imposibles que encierran «un truco», el truco de la luz negra.
No temáis a la oscuridad. Ellos, los más pequeños, tampoco lo harán. En El Truco de Olej la oscuridad es tan necesaria como mágica; la gran aliada de los títeres, objetos y colores fluorescentes que danzan al ritmo de una música que acompaña en la «aventura». ¡Me atrevería a decir que los espectadores que más lo apreciarán serán los que tienen entre 2 y 7 años!
¿Cumplirá Olej su sueño? El público (que se cuestiona en todo momento cómo es posible lo que ven sus ojos) sí lo hará y pasará a formar parte de un grupo selecto de espectadores que descubren el secreto del teatro negro de la mano de la Kompañía Romanelli. ¡No perdáis esta oportunidad!