Todos nos hemos refugiado en un transistor a altas horas de la noche para compartir o espiar en los dramas y en las soledades ajenas y reconocibles.
Cinco autores sensibles y consagrados, un director solvente y respetuoso y un grupo de actores amorosos, carismáticos y muy, muy entregados. Éxito asegurado. Al menos han creado un espectáculo precioso, reconocible, muy emocionante y cercano sobre las voces de la noche. Las soledades y las necesidades que se magnifican a la luz de las bombillas.
Pepa Zaragoza, Antonio Gil, Samuel Viyuela, Carolina Yuste y Ángeles Martín dan vida a un grupo de seres solidarios y solitarios, perdidos y necesitados, dolientes y supervivientes. Gente real y reconocible con problemas y carencias comunes y cercanas.
Teatro de sentimientos. De sentimientos suaves, nada estridentes, pero dolorosos, como son los problemas por la noche.
Si pinchas AQUÍ podrás leer un comentario más extenso que he publicado en mi blog DESDEELPATIO.