Qué duro es darse cuenta de que nuestra historia reciente en realidad es más reciente que histórica. Los restos del franquismo siguen incrustados en nuestra democracia y todavía quedan por desenmascarar multitud de asesinos y torturadores. Uno de ellos de Antonio González Pacheco, alias Billy el Niño, que en julio de 1977, hace hoy 45 años, fue condecorado con la medalla de plata al mérito policial.
Sobre este tétrico homenaje escriben Ruth Sánchez y Jessica Belda en su propuesta de teatro documental, una propuesta que resulta dolorosa por su crudeza y por su alto componente de realidad. Las autoras se ubican en un equilibrio frágil con relatos descarnados combinados con altas dosis de ironía y conforman unos personajes caricaturizados y grotescos, que, en realidad, no parecen demasiado alejados de las personas que un día fueron.
Eva Redondo dirige con ingenio esta propuesta que se aleja de lo sutil para plantar sobre la escena una realidad dolorosa y silenciada. Redondo afronta el reto de poner en escena un texto denso extraído de documentos oficiales y declaraciones de víctimas y logra con gran éxito construir un relato ágil, sorprendente y, por momentos, incluso divertido.
Antonio Gómez, Jesús Barranco y Jessica Belda dan vida a los personajes de esta historia fragmentaria poniendo en juego el cuerpo y la palabra en un equilibrio perfecto. Destacaría, en particular, la interpretación de Jesús Barranco que encarna personajes diferentes y dignos con un brillo único. ¡No se la pierdan!