“Masked” resiste entre las aguas de la multiprogramación para traernos esta historia, escrita por el israelí Ilan Hatsor, de tres hermanos Palestinos que viven la noche más decisiva de sus vidas.
Una historia dirigida por Íria Márquez -¡Queremos más de ella!- sobre el conflicto palestino-israelí que se nos mete en los ojos como un puñado de arena, que nos grita su denuncia desde un lugar desde el que es inevitable sentirse identificado: La familia. Tres visiones de un mismo conflicto político, un drama familiar y la urgencia en su resolución hacen de esta función un recital terrible, que se sufre desde la butaca.
Pedro Santos, Antonio Lafuente, que se alterna con Mon Ceballos, y Carlos Jiménez Alfaro nos regalan un ramillete de interpretaciones sobresalientes, cercanas y dolorosas, que sobrecogen por su sinceridad y que convierten esta pieza en un imprescindible de la cartelera.
Un aplauso para los Teatros Luchana que han querido rescatar una función tan necesaria como “Masked” y hacer posible que llegue a ese público que no pudo disfrutarla en su momento.