De lo mejor del año
Mauthausen. La voz de mi abuelo

Mauthausen, la voz de mi abuelo es uno de los mejores espectáculos que he visto este año en Madrid. Es de esas raras veces que vas a ver una obra con muchas expectativas y compruebas, al final, que el espectáculo las ha superado. Y esto es así porque todos los elementos de esta obra forman parte de un exquisito engranaje que funciona con sincronizado ritmo y milimétrica perfección. La escenografía, la utilería, el humo, la luz y la música son auténticos personajes que ayudan, como nunca había visto antes -salvo en las obras de la Zaranda- al personaje principal. Y todo ello dirigido con gran maestría por Pilar G. Almansa, responsable también de la dramaturgia. La obra está basada en los relatos de Manuel Díaz -Manolito, en la obra-, quien, desde los quince años que llegó a nado al peñón de Gibraltar, sobrevivió a la guerra civil española, al campo de refugiados de Argelés, al ejército francés en el que se enroló y a los campos de concentración nazis. Manolito está interpretado con prodigiosa naturalidad por la actriz malagueña Inma González -nieta de Manuel Díaz-, que también es responsable, junto a Almansa, del espacio escénico. Enhorabuena a Inma y Pilar, a Jesús Antón por la estupenda iluminación y a Luis Miguel Lucas por esa música que todavía suena en mi cabeza. Y dense prisa porque las entradas se agotan en cada función.