Eduard Fernández
Eduard Fernández estudió mimo en el Institut de Teatre de Barcelona. Comenzó actuando en un cabaret de la misma ciudad y en el teatro con la compañía Els Joglars, de la mano Albert Boadella –Columbi Lapsus–. Tiempo después actuó en el Teatre Lliure a las órdenes de directores como Lluís Pasqual en obras como Esperando a Godot o Hamlet –por la que fue premiado en los Premios Max al Mejor Actor Protagonista y en los Fotogramas de Plata como Mejor Actor de Teatro–; o Calixto Bieito –El rey Juan, Anfitrión, La tempestad–. También ha trabajado de la mano de Lluís Homar –Paradero desconocido– ; Álex Rigola –Suzuki I y II–, o Georges Lavaudant –Panorama desde el puente–.
Fue con Los lobos de Washington, dirigida por Mariano Barroso en 1999, que consiguió su primera nominación al Goya en la categoría de Mejor Actor Revelación. Desde entonces, sus papeles le han valido numerosos reconocimientos: tres premios Goya –Mejor Actor Protagonista por Fausto 5.0, dirigida por Álex Ollé y Carlus Padrissa; Mejor Actor de Reparto por En la ciudad, de Cesc Gay; y Mejor Actor de Reparto por encarnar a Millán Astray en Mientras dure la guerra, dirigida por Alejandro Amenábar–; una Concha de Plata en el Festival de San Sebastián 2016 por El hombre de las mil caras, de Alberto Rodríguez Librero; tres Premios Gaudí y tres Binazgas de Plata, entre otros–. Recientemente ha rodado Los renglones torcidos de Dios, de Oriol Paulo y ha protagonizado la película Mediterráneo, dirigida por Marcel Barrena.
En televisión ha trabajado en series como Historias para no dormir, de la mano del director Rodrigo Cortés; en 30 Monedas –Premio Feroz 2021 a Mejor Actor–, realizada por Álex de la Iglesia; o en Criminal, de Mariano Barroso –por la que fue nominado a mejor actor de reparto en los Premios Feroz 2020–.