Pulgarcito se ha cansado de crecer como persona. En esta obra contamos dos historias que en realidad son la misma: Una es un cuento, y la otra es el por qué se cuenta el cuento. Una historia de realidad y otra de ficción.
Tomando de protagonista a un personaje de los cuentos de su infancia un dramaturgo trata de escribir una obra. Empleando la ficción espera dar respuesta a los problemas que vive tras independizarse de casa de sus padres, con quienes mantiene una relación cada vez más distante. Pero, ¿hasta qué punto una obra es ficción si cuentas toda tu realidad? Y ya no solo la tuya, sino la del elenco de tu compañía.