Yo solo quería caminar

Una familia de clase baja se prepara para el cumpleaños de Branko, que cumple 25 años y se desplaza en una silla de ruedas por una enfermedad degenerativa. El seno de la familia está arruinado por la decadencia y la desgracia; que se personifica en la demencia senil de su abuela, en la desgana paterna, en la pasividad familiar y en un conjunto de eventos pasados que abrieron unas grietas que hoy parecen imposibles de cerrar. Junto a estas circunstancias convive una nueva generación que como un torrente navega entre sus respectivas problemáticas: Inclusión, identidad de género, gestión de expectativas, exploración de su sexualidad y muchas otras. El sueño de un futuro mejor, hilado al deseo de amar y ser amado, choca con la desesperanza de las circunstancias en las que viven. Una comedia negra sobre la futilidad de la vida frente a la fuerza irrebatible de una juventud que lucha por vivir.