Henrik Ibsen: El pato salvaje
Drama

Henrik Ibsen: El pato salvaje

El pato salvaje es un espectáculo dirigido por Carlos Aladro y con adaptación de Pablo Rosal, a partir de la obra de Ibsen. Una obra que se alza como una desvergonzada maquinaria que pone en duda la pervivencia del drama mismo y la vigencia de nuestros endebles valores. Un mensaje cargado de perplejidad y conciencia para el futuro.

Sinopsis

Montar una obra de Ibsen en ya pleno siglo XXI es un acto de responsabilidad cultural y devoción teatral que debe ser celebrado. Es, si cabe, un acto de resistencia extremadamente útil y necesario, y es que, quizá, no hay nada que defina mejor nuestro tiempo que el consumo hiperindividualizado de complejos dramas: y en eso, Ibsen, tiene sustancial y fundacionalmente bastante que contarnos. En un mundo que perdía referencias y valores de forma precipitada y terminal, el autor noruego consolidó una forma dramática que conseguía abrazar la confusión moderna que se expandía sin freno. Su Drama conquistó a la humanidad y se ha diseminado infinitamente en todo hasta nuestros días. Montar un Ibsen es un acto de clarividencia desesperado.

El pato salvaje es un enigmático drama, aislado dentro de la indisoluble dupla vida-obra que fue la existencia y trayectoria de Ibsen. Marca un punto de inflexión y concita una desconcertante mezcla de temas y géneros que multiplica la fascinación por uno de los indiscutibles consolidadores del drama moderno. Adentrarse en Ibsen en el siglo XXI es intentar comprender el poder de subyugación de las ficciones, la multiplicidad de capas que apabullan y perforan la realidad, el indiscernible peso del pasado.

Sinopsis

Montar una obra de Ibsen en ya pleno siglo XXI es un acto de responsabilidad cultural y devoción teatral que debe ser celebrado. Es, si cabe, un acto de resistencia extremadamente útil y necesario, y es que, quizá, no hay nada que defina mejor nuestro tiempo que el consumo hiperindividualizado de complejos dramas: y en eso, Ibsen, tiene sustancial y fundacionalmente bastante que contarnos. En un mundo que perdía referencias y valores de forma precipitada y terminal, el autor noruego consolidó una forma dramática que conseguía abrazar la confusión moderna que se expandía sin freno. Su Drama conquistó a la humanidad y se ha diseminado infinitamente en todo hasta nuestros días. Montar un Ibsen es un acto de clarividencia desesperado.

El pato salvaje es un enigmático drama, aislado dentro de la indisoluble dupla vida-obra que fue la existencia y trayectoria de Ibsen. Marca un punto de inflexión y concita una desconcertante mezcla de temas y géneros que multiplica la fascinación por uno de los indiscutibles consolidadores del drama moderno. Adentrarse en Ibsen en el siglo XXI es intentar comprender el poder de subyugación de las ficciones, la multiplicidad de capas que apabullan y perforan la realidad, el indiscernible peso del pasado.

Ficha artística
Fotos y vídeos
¡Enlace copiado!