Javier Molina, actual director artístico del Actors Studio de Nueva York, dirige Panorama desde el puente, de Arthur Miller, con adaptación de Eduardo Galán. Una tragedia que explora las tensiones emocionales y sociales en una comunidad ítaloamericana en Brooklyn (Nueva York) durante los años 50. En el Teatro Fernán Gómez. Centro Cultural de la Villa.
Sinopsis
La obra se centra en Eddie Carbone, un estibador que vive con su esposa Beatrice y la sobrina de su mujer, Catherine. La llegada de dos inmigrantes ilegales, Marco y Rodolfo, desata una serie de conflictos que revelan las pasiones ocultas y las contradicciones de Eddie. Eddie, inicialmente protector con Catherine, desarrolla una obsesión por ella que lo lleva a cuestionar las intenciones de Rodolfo, quien inicia un romance con la joven. A medida que los celos y la desconfianza crecen, Eddie toma que lo enfrentan con su comunidad y con su propia moralidad. La obra culmina en una tragedia que pone de manifiesto las complejidades del deseo, la lealtad y la justicia.
La obra aborda temas como las consecuencias trágicas del deseo prohibido, la inmigración ilegal, el sueño americano y las dinámicas familiares, mientras reflexiona sobre los límites entre el deber y el deseo. Con una narrativa dramática intensa y personajes profundamente humanos, Panorama desde el puente sigue siendo una pieza emblemática del teatro contemporáneo. Con diálogos rápidos y duros, con fuerza dramática, con profunda humanidad.
En palabras de Eduardo Galán
Más de dos millones y medio de latinos viven en la ciudad de Nueva York actualmente. Y en Madrid viven casi trescientos mil latinos. Arthur Miller centró la trama de Panorama desde el puente en la ciudad de Nueva York en la década de 1950. Mostraba la migración italiana, que soñaba con vivir en el país de las oportunidades.
El sueño americano es también el que ilumina hoy a tantos hispanos que viven en Nueva York. De alguna manera también venezolanos, peruanos, mexicanos, ecuatorianos y otros muchos hispanos vienen a España con la esperanza de encontrar mejores condiciones de vida que en sus países de origen.
En mi opinión, Miller nos plantea un drama amoroso y familiar trágico, donde el deseo reprimido de Eddie Carbone por su sobrina Catherine desencadena celos, obsesión y traición. Su rechazo a la relación de Catherine con Rodolfo (migrante italiano primo de su mujer, que vive en su casa) es más emocional que racional, llevándolo a actos destructivos como denunciarlo ante Inmigración. El amor fraternal de Marco por su hermano Rodolfo también juega un papel clave, enfrentándolo a Eddie. La obra muestra cómo el amor prohibido y los celos chocan con las normas sociales, provocando la caída del protagonista y sellando su trágico destino.
La obra de Miller plantea interrogantes y no propone soluciones. Creo que es el momento de mostrar Panorama desde el puente al público contemporáneo. Una obra de proyección internacional, dirigida por el estadounidense nacido en Puerto Rico Javier Molina, actual director artístico del Actors Studio. Contamos, además con el diseño de vestuario del nortea- mericano nacido en República Dominicana Emilio Sosa, actual presidente de la American Theatre Wing.
El cóctel está servido: el mejor dramaturgo norteamericano del siglo XX, un director de es- cena neoyorkino de origen hispano, un figurinista neoyorkino también de origen hispano, un reparto español y el sueño de rozar el alma del público de hoy.