Ragazzo es un espectáculo escrito y dirigido por Lali Álvarez, que pasó dos años documentándose y hablando con la familia de Carlo Giuliani (activista italiano que cayó abatido a tiros por la policía en la Via Tolemaide). Un monólogo que interpreta Oriol Pla, de texto directo, vibrante, sensible. Un chute de energía, un canto a la vida que se estrenó hace seis años y, desde entonces, no ha hecho más que girar, cosechando buenas críticas, ovaciones del público y premios, como el de la Crítica de Barcelona a la mejor obra para jóvenes y actor revelación y Premio Serra D’OR al mejor espectáculo de teatro.
Sinopsis
Europa, verano de 2001. La ciudad de Ragazzo vive la restricción de derechos sociales más grande que ha vivido el continente desde la segunda guerra mundial: las fronteras están cerradas, se suspende el tratado Schengen, se prohíben las manifestaciones y reuniones en algunas zonas de la ciudad, se prohíbe tender la ropa en los balcones.
Detenciones. Identificaciones. 30.000 policías patrullan las calles y no permiten la entrada en la Zona Roja, el lugar donde los líderes del G8 están celebrando la reunión.
Ragazzo, a pesar de todo, vive el verano de la ciudad: hace poco han okupado con unos amigos un espacio que han acondicionada como vivienda, está de vacaciones, tiene tiempo de escuchar música, leer, cocinar, enamorarse… y para participar en el Foro Social Mundial que también se ha instalado en la ciudad y donde más de medio millón de personas discuten como sería este “otro mundo posible” que desde hace un año y medio se imaginan como alternativa a la globalización. Su destino quedará marcado cuando tome la decisión de quedarse en la Columna de Desobedientes que se ha propuesto una acción pacífica de desobediencia civil: violar el confinamiento de la Zona Roja.
¿Qué hacer ante la amenaza? ¿Tiene legitimidad un gobierno que se ha de blindar para decidir? ¿Quién (y para qué) hace servir la violencia? ¿Qué es la impunidad? ¿Otro mundo es posible?
Europa, verano de 2001. La ciudad de Ragazzo vive la restricción de derechos sociales más grande que ha vivido el continente desde la segunda guerra mundial: las fronteras están cerradas, se suspende el tratado Schengen, se prohíben las manifestaciones y reuniones en algunas zonas de la ciudad, se prohíbe tender la ropa en los balcones.
Detenciones. Identificaciones. 30.000 policías patrullan las calles y no permiten la entrada en la Zona Roja, el lugar donde los líderes del G8 están celebrando la reunión.
Ragazzo, a pesar de todo, vive el verano de la ciudad: hace poco han okupado con unos amigos un espacio que han acondicionada como vivienda, está de vacaciones, tiene tiempo de escuchar música, leer, cocinar, enamorarse… y para participar en el Foro Social Mundial que también se ha instalado en la ciudad y donde más de medio millón de personas discuten como sería este “otro mundo posible” que desde hace un año y medio se imaginan como alternativa a la globalización. Su destino quedará marcado cuando tome la decisión de quedarse en la Columna de Desobedientes que se ha propuesto una acción pacífica de desobediencia civil: violar el confinamiento de la Zona Roja.
¿Qué hacer ante la amenaza? ¿Tiene legitimidad un gobierno que se ha de blindar para decidir? ¿Quién (y para qué) hace servir la violencia? ¿Qué es la impunidad? ¿Otro mundo es posible?
- Dirección:
- Autoría:
- Ayudantía de dirección:
Quimet Pla - Iluminación:
Núria Solina - Sonido:
Pau Matas - Música:
Zoo
- Iván F. MulaTeatro Madrid
- Neus Mònico FernándezTeatro Madrid
- Andreu RamiTeatro Madrid
- Gema MoraledaTeatro Madrid