Cuatro escaladoras y una montaña que escalar; si a esto unimos un secreto desvelado y un gran sentido del humor dan como resultado una obra redonda donde grandes actrices, la dirección de Sergi Belbel y el texto de Jordi Galcerán hacen necesaria la visita a este teatro para disfrutarla.
Este plantel es de por sí un reclamo para verla, siendo además un alegato contra las adversidades, la necesidad de enfrentarse a los problemas y la escalada física y emocional que tenemos que hacer siempre en la vida pero sin abandonar el optimismo y el buen humor. Sin embargo por encima de todo está el hecho de convertir un sueño en realidad, siendo aquel uno de los mas grandes de tu vida.
Si bien los primeros 15 minutos se hacen un poco largos; el resto del desarrollo es hilarante y dinámico.
Cuando salí del teatro no tuve ganas de hacer escalada ¡tuve ganas de comerme la vida a carcajadas!