Pocas veces podemos disfrutar de un equipo de más de 60 personas encima de un escenario, ni siquiera con los grandes musicales que acostumbran a ver en los teatro. La fura dels baus lo ha hecho posible al traernos este montaje que ha girado por todo el mundo con gran éxito.
Se trata de una ópera de poco más de una hora de duración que se aleja del clasicismo escénico y que incorpora una puesta en escena moderna bebiendo de los elementos característicos de la compañía, que acerca el género a un tipo de público que posiblemente no está acostumbrado. Realmente, se notan las ganas de explorar la ópera y de ofrecer una nueva lectura o de encontrar nuevas vías de aproximarse, y siempre siendo respetuosos con ésta y denotando un gran conocimiento de la misma.
Así, se consiguen momentos impactantes visualmente, ya sea a través de los audiovisuales, o con la mezcla de colores en la iluminación, el vestuario, el maquillaje e, incluso, el agua. No obstante, algunos de estos momentos no son suficientes para aguantar determinados temas musicales, pero cuando lo hacen resultan muy potentes.
Del mismo modo, el ritmo del espectáculo a veces resulta lento, especialmente durante las transiciones y en alguna repetición estilística. Aun así, el conjunto del espectáculo resulta satisfactorio, ofreciéndonos una gran interpretación musical y un trabajo de voces excelente gracias a la Polifónica de Puig-reig. Además, hay que decir que ni que sea por tener la oportunidad de disfrutar de la estupenda interpretación del célebre tema musical de «O fortuna» de Carl Orff ya merece la pena pagar la entrada, añadiendo también el bonus de la lectura escénica que se ha realizado y que nos hace vivir la ópera de una manera diferente, quizás más próxima.