Había oido hablar de la obra La madre que me parió, pero hasta ayer no entendí la razón por la que ya iban por la 9º temporada y el Teatro Lara estaba repleto. Es una obra fresca, dinámica y muy muy divertida, y da igual que tengas un día ‘gris‘ en el cuál parezca que no te van a poder arrancar ni una risa ni minisonrisa, porque lo van a hacer y con creces.
La obra idea de Ana Rivas y escrita por ella junto con Helena Morales, y bajo la dirección de Gabriel Olivares, es sencillamente deternillante. Toda la obra transcurre en los baños de un hotel, en la boda de una de las cuatro amigas. Todos sabemos que el baño, aunque parezca mentira, a veces se convierte en un lugar de encuentros, confesiones y las más dispares de las situaciones…pues en este baño y en este hotel ocurre eso y más; y por si solo eso no bastará, las tres amigas que acuden a la boda de su amiga que por cierto, no tiene muy claro que haya sido buena idea lo de casarse, van acompañadas de sus madres, y las situaciones que allí surgen con la intervención de estas últimas solo hacen que mejorarlas.
Todo el elenco es maravilloso, aunque en mi opinión las interpretaciones y momentos que nos brindan las madres son los mejores; Marisol Ayuso, Eva Barceló y Olga Hueso –Aurora, Pilar y Merche respectivamente, las madres– y Rebeca Plaza, Mar Mandli y Patricia Delgado -Alba, Natalia y Bea, sus hijas-, junto con la novia con dudas y amiga por la que están todas allí, Ana Villa y el único hombre en escena, Diego París, completan el inmejorable elenco.
Esta obra nos muestra la realidad de las relaciones madre-hija que nos ‘tocan’ a muchas de las espectadoras muy de cerca, nos sentimos identificadas con ellas y con muchas de las frases que parece que solo dice tu madre pero resulta que son universales, y como a pesar de renegar siempre las hijas de sus madres, al final aunque en versión modernizada y evolucionada, tienen muchos parecidos con ellas. Todo ello mostrado con un toque positivo y cómico infalible, que hace que todo el que está sentado en una butaca de la sala no pueda parar de reirse.
Solo digo que la ví ayer y ya he cogido entradas para verla otra vez con mi madre. Recomendable 100%, su novena temporada lo avala y las risas están más que aseguradas.