¿Qué se puede hacer con «La voz humana» que no se haya hecho ya? ¿Qué se puede decir que no se haya dicho de otras versiones? ¿Es posible que una actriz esté mejor que Anna Magnani, Ingrid Bergman, Amparo Rivelles, Anouk Aimée o Sophia Loren? ¿Aguantará este texto el siglo XXI? La respuesta a todo esto la puedes ver (o vivir) en el Pavón Kamikaze.
Dirige Israel Elejalde y también firma una versión actual y brillantísima. Además consigue que lo que vamos a compartir con Ana Wagener sea tan sutil como las notas sencillas y demoledoras de la música que ha creado Arnau Vila. Apenas dos notas nacidas del dolor y que inundan de sencillez una puesta en escena magistral.
Lo de Ana Wagener es imposible de definir. Sólo se puede decir que para llegar a lo que ella hace hay que haber pasado por millones de estados de ánimo y de desánimo. Es portentoso. Sencillamente, de las mejores interpretaciones (o vivencia, cualquiera sabe) que he visto en toda mi vida.
Como las sensaciones, los dolores y los detalles son tantos, tengo que recomponerlos en mi corazón, pero me he explayado a gusto en mi blog, DAVIDDESDEELPATIO, y si pinchas AQUÍ, podrás leer ahí una crónica más extensa. De momento… corre a comprar entradas, porque este es uno de los acontecimientos de los que podrás presumir de haber visto.