Absolutamente genial! Una conjunción espectacular de los dos jóvenes actores: Enric Cambray y Ricard Farré. La dificultad de encarnar ocho personajes diferentes, con todo lo que ello conlleva, en poco más de una hora, es un aliciente extra para ponerse a prueba en esta fantástica propuesta. Una coordinación conseguida a base del rodaje que tiene la obra que llega al auge con la incorporación de nuevas modificaciones del texto dado a la situación política que vivimos! Con la proximidad y la participación del público se rompe la cuarta pared hasta un punto extremo que cada gota de sacrificio de los dos artistas te puede caer encima. Una comedia que incorpora momentos musicales con el fin de agradar a cualquier público dispuesto a reír.