Cuando leí la novela de Cristina Morales, Lectura Fácil, que la tenía muy pendiente y la llegada de la adaptación al teatro me sirvió como excusa para hincarle el diente, pensé, ‘wow… A ver cómo narices se adapta esto a teatro sin que pierda la potencia del texto’, pues Alberto San Juan lo ha conseguido. La versión teatral del premiado texto es muy fiel al libro, y sabe retratar la esencia de los personajes y de los mensajes principales de Morales a la escena.
La obra es, tal como el libro, a la par impactante, reflexiva, humorística y nos hace ver con unos ojos muy diferentes qué significa tener una discapacidad y hasta qué punto las personas con algún tipo de condición de discapacidad deben o no tener a alguien, ya sea una persona o las propias instituciones, que tomen decisiones por ellas, en principio, por su propio bien; decisiones que no solo atañen a dónde vivir, si no a sus ideas, sexualidad, independencia, gustos, incluso su cuerpo… territorios en los que, cualquier persona a la que no se le retira ese derecho a decidir, ni se cuestionaría que otros decidieran por ella, ¿o sí?.
También es una obra muy combativa, antisistema, que pone todo del revés a través, sobre todo, del personaje de Nati (he de confesar que es mi preferido), que, sin filtro ninguno debido a su condición, lanza llamas por la boca cada vez que considera que algo no es justo, que básicamente es casi siempre, para con ella, su entorno o sus primas.
Te diría que si eres más de libros que de teatro, leas la novela antes, pero que si no, y te gusta más el arte en vivo, te dejes sorprender directamente con la pieza teatral, a mí me habría encantado disfrutarla con ojos de quien no sabe qué va a ver, pues eso permite posiblemente abrirte reflexiones que, en caso de haber leído la novela, quizás ya las tienes hechas desde casa. Aunque la obra suma protagonismo de personajes no tan principales en la novela y éstos son representados por dos actores y una actriz con discapacidad, que le da a la pieza un toque diferenciador y que va un poco más allá que el libro, algo de agradecer para los que ya conocen la novela, pues te permite ver más aristas de un tema tan complejo.