Después de más de cuatro años recorriendo España y programados en diferentes teatros de Madrid, ‘Los Remedios’, la obra escrita por Fernando Delgado-Hierro protagonizada por él mismo y por Pablo Chaves, vuelve al Teatro Lara para despedirse, quién sabe si esta vez de manera definitiva. Lo que hacen estos dos amigos actores de Sevilla en el escenario, de la prodigiosa mano de Juan Ceacero, es uno de los mejores ejercicios teatrales de los últimos años: una autoficción divertidísima, conmovedora y perfecta en su imperfección, un viaje al pasado donde los recuerdos y la imaginación dan lugar a una serie de escenas costumbristas de Los Remedios, el barrio sevillano donde los protagonistas crecieron y al que vuelven una y otra vez, aunque aún no sepan qué han ido a buscar allí.
‘Los Remedios’ habla de la familia, las tradiciones, el desarraigo, la sexualidad y, en especial, de la amistad. Fernando y Pablo llevan toda una vida juntos y así lo recalca su complicidad en el escenario. Ya no son unos niños y, sin embargo, siguen encontrándose tan perdidos como entonces. Gracias al teatro, a su poder de transformación y a la confianza depositada en la relación que les une, los dos intérpretes pueden dar sentido a su existencia, a sus inquietudes y a los fantasmas que les han perseguido desde niños. Un espectacular trabajo corporal y una vis cómica admirable les acompaña en cada momento. Si alguien no ha visto Los Remedios, aún tiene una oportunidad de disfrutar de una experiencia imprescindible y necesaria para cualquier amante del teatro. Y de la vida.