Es difícil describir los lazos que nos unen a la familia más allá de la sangre… No son aficiones comunes ni formas de ser afines, tampoco es una forma compartida de ver la vida. Y, entonces, ¿por qué? ¿Qué sentido tiene darlo todo por ellos y ellas? ¿Qué sentido tiene que ese hogar familiar sea el nido en el que todos nos refugiamos cuando estamos rotas? Carolina África elabora una propuesta costumbrista para poner sobre la escena esta y otras contradicciones que acompañan a la vida familiar. Con un texto sencillo y natural atravesado por el humor, más o menos negro en función de la escena, África aborda cuestiones como la maternidad, la expectativas, la ayuda, la escucha, la soledad, el acompañamiento y el amor.
Para mí, uno de los principales aciertos de la función es el tratamiento de la maternidad en el personaje que ella misma interpreta. Resulta abrumadora e hipnótica su presentación de vivencias como el parto y la lactancia, vivencias que, de hecho, son abrumadores y que pocas veces vemos reflejadas con crudeza, y desde una perspectiva femenina, en la ficción. La directora y dramaturga da en el clavo en su construcción de la relación entre las cuatro hermanas, plagada de complicidad, mala baba y barbaridades que solo se le dirían a una hermana. La matriarca de la tribu, que podría ser la madre de todos y todas, con esas míticas «frases de madre», es un elemento fundamental del sentido cómico de la pieza. Sin embargo, con este personaje, construido desde la mirada de sus hijas, perdemos la oportunidad de profundizar e indagar en sus motivaciones y sus procesos para entender por qué dice lo que dice y hace lo que hace.
La propuesta de Carolina África viaja del Teatro María Guerrero a la Sala Cuarta Pared y puede que, por momentos, el escenario de esta sala se le quede algo escaso a la magnífica escenografía de Mónica Boromello. Aun así, no dejen pasar la oportunidad de entrar en el salón de esta familia de mujeres fuertes y reales que viven cómo pueden y cómo saben. A lo mejor salen con ganas de una buena cena familiar.