No sabría como definir Stracciatella. La idea es original y está muy bien elaborada, pero en muchos momentos me desconcertó hasta donde llega la realidad y empieza la imaginación, pero os voy a poner en contexto.Tenemos a cuatro hermanos que se reunirán en una cena tras años sin verse, pero el único nexo en común que tenemos es María (la hermana mayor). Ella les ha reunido con varios propósitos, pero todo salta por los aires, ya que la caja de Pandora se abre y empieza a salir todo lo guardado con llave, todo el resentimiento, etc.
Es un texto tan intenso que en algunos momentos me llegué abrumar de tanta información y tantas cosas que al final del todo no se nos son aclaradas y eso me gustó, ya que no todo nos lo tienen que dar masticado o contado, ya que el espectador se tiene que hacer preguntas. Es significativo que se haya elegido la Navidad y que todo lo que sucede en el pasado, también tiene que ver con esta época.
María sabe todo de todos y es la que más recuerdos tiene de muchas cosas que ocurrieron, pero también creo que es la que más luz aporta. Andrés, Maite y Conchita se han desvinculado de la familia y se nota en muchos detalles y es doloroso que en vez de ser valientes y decir las cosas a la cara se escondiesen.
Stracciatella está llena de personajes imperfectos, pero con muchas capas que no se ven y que lentamente las iremos descubriendo.
Es una obra irónica en muchas ocasiones y muy complicada de llevar en el momento que se tocan temas delicados, pero el elenco sale airoso de ello.Hay instantes que te ves venir y otros que te pillan desprevenidos, pero pasemos a la parte que más me gusto.La parte de los cuentos o de las historias sirven para evadirse de la dura y triste realidad son los que a muchas personas no les vuelven locos y es la forma metafóricamente de contar lo que uno siente.Me gustó en conjunto la historia, pero hay momentos en los que no sabía hacia que lugar se dirigía la conversación o el cambio de una charla a otra, como que me desconcentró, pero siempre cogía el hilo. Hay muchas cosas que se me quedan en el tintero, pero en Stracciatella no nos cuentan todo y dejaré volar mi imaginación como el padre.
El elenco en sus papeles están geniales y se nota el carácter tan distinto de cada uno, aunque es Elena, la que en algunos momentos pensaba ¿qué hace ella? ¿qué es lo que la ocurre? hasta que todo quedó aclarado, aunque hasta ese momento, como que me desconcertó. Todavía estoy procesando la obra, pero eso es bueno, ya que indiferente no me ha dejado.