David Serrano lanza un mensaje de superación ante la pérdida desde ‘Los Universos Paralelos’

José Antonio Alba

Después de su estreno hace unos meses en Avilés, llega a la sala principal del Teatro Español Los Universos Paralelos de David Lindsay-Abaire en versión y dirección de David Serrano, director todo terreno al que le da lo mismo echarse un musical como Billy Elliot a las espaldas, dirigir a dos grandes del teatro como Julia Gutiérrez Caba y Miguel Rellán en Cartas de Amor o lanzarse a un drama familiar como Los Universos Paralelos en el que cuenta con un reparto como Malena Alterio, Daniel Grao, Carmen Balagué, Belén Cuesta y el debut de Itzan Escamilla, tres funciones que casualmente coincidirán en cartel en los próximos días.

Los Universos Paralelos cuenta la historia de una familia que se enfrenta a la pérdida de un hijo. Habla de cómo cada uno de ellos -Podríamos ser cualquiera de nosotros- afronta un drama como este. Una historia que, lejos de apalancarse en la tragedia desgarradora que un hecho como este supone, busca un camino inspirado en la superación, como bien indica Malena Alterio Es una historia muy luminosa que no solo es la historia triste de la pérdida de un hijo, si no la historia de supervivencia de una familia.”

Su director, David Serrano, habla de la historia y de su autor, David Lindsay-Abaire, quien ganó el Premio Pulitzer en el año 2007 con ella Desde que la leí se convirtió en una obsesión hacerla, la verdad. Me entusiasmó el texto. Ya hice una función suya hace dos años, Buena Gente, y me parece uno de los mejores dramaturgos que conozco. Es un maestro en escribir sobre situaciones y personajes absolutamente cotidianos. Tiene un don para el dialogo; dialoga como pocos autores y además tiene una virtud maravillosa y es que combina el drama y la comedia de una manera muy natural (…) se maneja con una maestría absoluta y consigue que en una misma escena estés al borde de la lagrima, pases a reírte y luego vuelvas a la emoción“

Una historia, la de Los Universos Paralelos, que trasciende más allá del lugar donde sucede ya que habla de una cotidianidad en la que todos nos veremos reflejados y de la que se pretende transmitir un mensaje positivo. Daniel Grao nos cuenta que en el proceso de ensayos se ha intentando acercar a nuestro ámbito a esta famlia americana a través de la adaptación y de naturalizar comportamientos y expresiones “Tuvimos mucha libertad, sobre todo al principio, de llevarlo a como hablamos nosotros y eso le da mucha organicidad (…) Nos lleva a ese piropo que oímos a veces por ahí cuando estamos de gira “Es que no parece teatro” porque das esa sensación de veracidad y de que estás espiando a una familia”

Un montaje que podría haber sido duro por su contenido y por la forma de tener que enfrentarse a él y que, sin embargo, los actores sin excepción han alabado la delicadeza de su director al trabajarlo David es un tipo muy inteligente, muy trabajador y que tiene muy en cuenta a los actores. Los quiere muchísimo” y es que David confiesa “Como director me pongo al servicio del texto y de los actores, siempre intento que estén cómodos y llevarles a donde brillen más. Ha sido fundamental que todos tengan una forma de trabajar tan similar. Buscaba actores que trabajaran con absoluta verdad, estuvieran muy presentes en escena y se necesitaba un elenco que se comprometiera mucho con la función. Seguramente sea la experiencia profesional más bonita que he tenido a la hora de trabajar con un elenco, han tenido un comportamiento maravilloso conmigo, entre ellos, se han apoyado mucho. Es la función de teatro en la que más me ha acercado a lo que yo he querido hacer con la obra. Esta vez me he acercado bastante a lo quería y eso es muy complicado que ocurra”

Texto José Antonio Alba

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