El Teatro Pradillo además de ser uno de los espacios escénicos más longevos del panorama alternativo de la capital, es todo un referente del teatro multidisciplinar y ayer presentó oficialmente a su nuevo equipo gestor, el cual lleva trabajando en el proyecto desde abril del pasado año, que desveló el concepto que quieren poner en marcha desde la sala.
Este nuevo Equipo Pradillo está conformado por Carlos A. Alonso, Violeta Frión, Alberto García, Miguel González y Miren Muñoz junto a los comisarios: Itxaso Corral, Diana Delgado-Ureña y Jaime Vallaure. Todos ellos han unido fuerzas para ofrecer solidez al concepto de artes vivas que el Teatro Pradillo quiere sostener, tanto a nivel local como internacional, para ello han ideado diferentes espacios destinados tanto al intercambio entre artista y espectador, como para el desarrollo de las ideas y el trabajo del propio creador.
El nuevo concepto de espacios que han creado desde Pradillo se divide en tres conjuntos diferenciados. Un Espacio para Compartir que estará abierto al intercambio con el público y que abarcará la temporada de la sala, de Septiembre a Abril, y dos más que serán un Espacio para Generar y otro Espacio para Colaborar, ambos abiertos a los creadores, con la intención de ofrecer un lugar donde expandir, mostrar y formar propuestas y lenguajes. Una clara prueba del concepto ofrecido es el reciente Festival Pendientes de un Hilo.
Teatro Pradillo quiere continuar siendo un lugar de referencia, ahora reforzado con este nuevo equipo, desde el que poder dar voz a cuantas expresiones artísticas sean posibles, como antídoto a la precariedad a la que muchas compañías se ven obligadas, ofreciendo un espacio desde el que poder expresar y compartir. La idea es hacer posible un lugar desde el que poder crear a cambio de mostrar el resultado final con unas condiciones básicas como son “el uso de la sala durante una semana, acompañamiento técnico y de producción básico, una cantidad destinada a honorarios, dos días de exhibición abierta al público y el 70% de la taquilla”.
Un concepto poco explorado en nuestra ciudad que llega para intentar combatir la precariedad y la marginalidad de algunas expresiones artísticas.
Texto José Antonio Alba