Don Quijote nómada adapta la novela de Cervantes en una pieza en la que confluyen la fórmula clásica de gira de cómicos de la lengua con una propuesta estética y técnica contemporánea. Esta voluntad toma forma en un collage que fusiona el espectáculo de títeres y el cine en directo, de tal forma que la poética tradicional se integre en la tecnológica. Los personajes construidos en papel están grabados por cinco cámaras que recogen los diferentes puntos de vistas que se ordenan en directo para narrar, en clave cómica, la historia del caballero de la triste figura.