A Banderas los amantes del musical debemos gritarle ¡Un millón de Gracias! Apuesta por musicales clásicos, arriesgados, en gran formato, repartos espectaculares, producciones muy, muy cuidadas, puro Broadway.
Tras A Chorus Line y esperando la recién estrenada Godspell, nos ofrece Company, primera vez en español (se vio en catalán con Roser Batalla en el reparto, ahora responsable de la notabilísima adaptación al castellano), todo un Sondheim (A little night music), que no arrasó en su carrera tanto en las taquillas como en las críticas.. Es esta una pieza donde cada canción en un hit, con piezas esenciales del género. Esta parte musical está, a mi parecer, por encima de “la historia”, formada por sketches (quizá por eso no es mi obra preferida del autor). Varias parejas prototípicas que, pretendiendo convencer al protagonista de que debe sentar cabeza y casarse, nos enseñan sus intimidades y secretos, un collage que debe hacer decidir al protagonista sobre afrontar el miedo a quedarse sólo o al compromiso. Si bien es cierto que algo mal ha envejecido, sigue vigente el miedo a asumir el paso del tiempo, la soledad, el madurar. No pretende, ni lo hace, dar una respuesta.
La producción está cuidadísima, con un diseño de vestuario, iluminación y caracterización perfecto para la NY de los 70, orquesta que suena nítida y con los matices de Sondheim, perfectamente dirigida por Arturo Díez-Boscovich, sonido impecable y un reparto maravilloso. A nivel escénico, apuesta por la sobriedad extrema, tanto que en un piso de clase alta las chaquetas se dejan en el suelo. También chirría algo que Banderas (que no da la edad para el personaje pero lo ha resuelto con un flashback) duerma vestido mientras su pareja, no. Pero son pequeñeces, como el acento de la azafata cuando habla pero no cuando canta, comparadas con el disfrute de las piezas corales, de Marta Ribera con su “Ladies who lunch” o el torbellino de “Getting married today” (récord de palabras por segundo hasta Hamilton), de la que recomiendo este video de la grabación original https://www.youtube.com/watch?v=UuQea2eVL2Y 50 años después sigo emocionándome cuando Beth Rowland sonríe al ver que lo ha conseguido.
Y a todo esto, Banderas está muy bien. No debería sorprendernos, que ya protagonizó en Broadway “Nine”. Llega a las notas que tiene que llegar, quizás con una transición no delicada. Y su carisma es innegable
En resumen: un musical imprescindible, con reparto y producción difíciles de ver, equilibrio entre comedia y seriedad, de uno de los mejores compositores del género (para los entendidos, el mejor).