David Selvas nos trae de nuevo esta comedia de Óscar Wilde con una interpretación más cercana en el tiempo de la obra teatral más famosa del autor.
El humor y la parodia juegan un papel decisivo en la crítica que hace el autor de la sociedad. Una sociedad hipócrita e interesada, condicionada por los estamentos sociales y sus estrechas convenciones,
Con una interpretación divertida -y cómica- vamos entrando en esta trama de malentendidos y disparates que ponen de manifiesto la falsedad y la importancia, por tanto, de ser honestos.
Con un enorme despliegue de entrega y buen hacer, la obra es divertida, amena y crítica, instándonos a valorar la verdad y la libertad por encima de absurdos clichés.