Yllana no defrauda.
En este espectáculo encontramos todos los elementos del clown clasico, mezclado con la magia y el teatro de máscaras ejecutado siempre con precisión y maestría. Son unos genios de la energía, el ritmo y el teatro gestual. Que difícil es hacer reir y que fácil lo hacen ellos. Es un espectáculo cerrado y sin fisuras, donde todo está medido al milímetro. No dejan nada a la improvisación y sin embargo parace todo lo contrario. Parecen 4 amigos jugando a policías y ladrones, desvariando y pasándolo bien. Hay humor para todos los gustos. Blanco, negro, absurdo, escatológico…. Los 4 actores desbordan energía y buen rollo desde el minuto uno. Mejor dicho, desde el segundo uno. Y eso se contagia. Te enganchan y ya no te sueltan, consiguiendo que participes y que, además, lo hagas de buen gusto.
Es un espectáculo de 10. Si se le puede sacar algún pero, sería que estén sólo un día por semana en un teatro pequeño y no llenando todas las noches en la Gran Vía. Sin desmerecer al teatro Alfil que siempre ha sido un teatro que apoya los pequeños montajes de calidad.
Desde mi humilde punto de vista, este es un IMPERDIBLE para el 2019.