Revisitar la historia siempre es importante. Revisitar la historia de España es necesaria pero si es la historia del colectivo LGTBIQ+ es vital. Kiki Morgan, travesti que se define como absurda, caústica y sicalíptica, nos narra el Via Crucis de este colectivo durante la dictadura franquista hasta su despenalización en 1978.
Con humor inteligente, talento y dicción; se nos muestran testimonios reales de esta época oscura desde un prisma realista y desenfadado. No dejamos de reir pero siempre tenemos el trasfondo de la dura y cruel realidad que se vivió.
Cada testimonio que nos narra Enrique Montero, actor que encarna con desparpajo, tablas, habilidad y maestría a Kiki durante 90 minutos el solito; nos permite conocer y horrorizarnos ante la forma de entender la homosexualidad que había en esa época y que nos permite establecer un paralelismo con los tiempos actuales donde comprobamos que algunas ideas retrógradas no distan tanto de aquellas…
Con la mínima escenografía, podemos disfrutar de uno de los mas grandes espectáculos de la cartelera madrileña. Necesario, vital, crudo, jocoso, agudo, inteligente….Todo esto y más es esta obra. Todo el público que se puso en pié para ovacionar a nuestra protagonista lo puede testimoniar; muy pocas obras consiguen esta unanimidad.