Decir que una obra es un viaje que va desde el origen mismo del teatro hasta nuestros días puede sonar a topicazo, pero en el Auto de los inocentes, que ahora estrena el Teatro de la Comedia y que recupera a José Carlos Plaza para este escenario, es toda una realidad porque, a través de una dramaturgia tejida por Pedro Víllora junto a su director, con la excusa de llevar el Auto de los Reyes Magos a escena, se ha logrado tender un puente entre ese texto, considerado el origen de nuestro teatro contemporáneo, y nuestros días. La siguiente pregunta que surge es ¿cómo?.
En el momento de presentar la producción a los medios, Plaza nos confiesa que aceptar la propuesta que el productor Celestino Aranda le hizo para poner en escena el Auto de los Reyes Magos es “Un ‘sí’ que no se piensa”, pero que al cabo de unas horas genera una serie de dudas y preocupaciones, ¿cómo hacer un espectáculo con tan solo 147 versos que contiene este Auto? Para ello han creado una analogía con el tema de los refugiados creando una especie de cuento adulto “Que sirve de bálsamo a las preguntas y penurias que no sabemos responder” comenta el director que ha situado la acción en un campo de refugiados en el sur de España donde la forma de vivir encuentra muchas similitudes con lo que podría ser la vida del siglo XIII. Algo que nos lleva a preguntarnos dónde nos hallamos, qué es lo que está pasando con esta sociedad que mira hacia otro lado, con el inmovilismo de la gente, la falta de moral social y política que encontramos a cada momento y que José Carlos Plaza no duda en definir como “un charco de mierda”.
Motivo por el que nació este «cuento negro, gótico», donde el teatro debe tomar cartas en el asunto, ejerciendo su labor como puente entre culturas y, a través de la metateatralidad, mostrarse gracias a la labor de los cooperantes que trabajan en este campo, quienes desempolvan los orígenes de nuestro teatro para mostrarles la cultura española a los refugiados; excusa perfecta para introducir el Auto de los Reyes Magos, y algo de nuestro barroco, junto a fragmentos del Auto de La vida es sueño, de Calderón, y del Auto del Hospital de los locos, de Valdivielso y lograr de esta manera conectar el origen de nuestro teatro y la más rabiosa actualidad, no solo escénica, si no aquella realidad que “Si no se ve no existe” como señala un emocionado Fernando Sansegundo quien nos explica la gran concienciación que le despierta este proyecto, como persona y como profesional, “Mi obligación es que se siga hablando”. Junto a él, en el reparto de esta producción, están Israel Frías, Pepa Gracia, Montse Peidro, Sonia Gómez Silva, Jorge Torres, Sergio Ramos, María Heredia, Javier Bermejo, Amanda Ríos, Álvaro Pérez, Pablo Rodríguez y Eduardo Aguirre de Cárcer quien a su vez es responsable de la música del espectáculo.
Tras su paso por el Teatro de la Comedia, el Auto de los Inocentes iniciará gira por espacios tan emblemáticos como la Catedral de Toledo, la de la Coruña o la Mezquita de Córdoba, lugares no convencionales que, sin duda, aportarán esa “vuelta” a los orígenes a través de nuestra realidad que predomina en esta propuesta.
Texto y fotos José Antonio Alba