Hace ahora justo un año veía por primera vez la luz El silencio de Elvis, historia escrita por Sandra Ferrús. Una propuesta que se estrena en el Teatro Infanta Isabel y que cuenta con Pepe Viyuela, Concha Delgado, Elías González, Susana Hernández y Martxelo Rubio en el reparto. Una obra donde se aborda la enfermedad de la esquizofrenia, situándola en el entorno de una familia humilde que asiste a lo más crudo de la reciente crisis económica.
La puesta en escena de El silencio de Elvis supone la primera vez para Sandra Ferrús como dramaturga y como directora “Sentí el impulso y la necesidad” nos cuenta con los ojos brillantes de entusiasmo “Me pilló en un momento que no tenía trabajo y me dio la oportunidad de experimentar. Iba escribiendo sin ninguna pretensión, compartiéndolo con gente cercana e iba viendo que pasaban cosas con esa gente y eso me motivó”. Una de esas personas a las que Sandra mostró el texto fue a Susana Hernández quien nos lanza un símil de lo que sintió al terminar de leerlo “Es como si me pusiera a hacer un hoyo en el jardín para plantar un geranio y ¡me encontrara un cementerio etrusco! Realmente me conmocionó. Tenía clarísimo que esta función tenía que montarse” dice la actriz que además es productora del montaje. “Me preguntó quién podría dirigirlo” nos cuenta Ferrús “y yo le dije: ‘Yo he fantaseado con dirigirlo’. Me dijeron que les parecía fantástico. Colgué el teléfono ¡y me puse a limpiar los cristales de mi casa como una loca pensando en lo que podía pasar!” relata con un entusiasmo contagioso “¡y de repente esto se ha materializado!”.
Un proyecto que aborda las enfermedades mentales desde el sentido del humor y la ternura, invitándonos a viajar por el interior de la cabeza de Vicentín, el primogénito de la familia, aficionado a los reallitys, que sufre de esquizofrenia. Un viaje en el que unas veces presenciaremos la cruda realidad de esta familia humilde y otras nos adentraremos en el rocambolesco mundo interior del muchacho “Van a encontrar un trasplante de vida al teatro” dice Pepe Viyuela que en esta parada en el Teatro Infanta Isabel se pone en la piel de Vicente, el padre de la familia“Cuando uno lee las noticias siente muchas ganas de llorar, pero viendo la función, esa pena se adereza con un gran sentido del humor y muchísima ternura. Estos personajes desprenden una humanidad enorme” Nos dice el actor.
Uno de los principales escollos a salvar era encontrar al actor que interpretase a Vicentín, “Tenía que ser una persona especial” nos dice Susana Hernández “Vimos muchos actores. Hay muchos actores jóvenes muy buenos en España” y nos cuenta que encontrar a Elías González resultó un flechazo “¡Ya es mi hijo! Es un actor que tiene luz, ángel, y que sabe meterse en lo oscuro” aunque el actor le resta importancia encogiéndose de hombros y contándonos que tan solo ha querido escapar de los clichés “He huido de estereotipos, es una persona normal. Ahí radica todo” nos comenta. «Normalidad» es la palabra clave para entender qué es lo que quieren transmitir a con esta función “Es mucho más fácil decir que tienes cáncer a decir que tienes una enfermedad mental” señala Pepe Viyuela “Hay una estigmatización y nosotros, con esta función, tenemos como misión ponerle luz. Se puede hablar de esta enfermedad igual que se puede hablar de cualquier otra”.
Hablar de un título como es El silencio de Elvis hace que a uno se le vengan a la mente diferentes connotaciones y Sandra Ferrús nos lo explica “Que aparezca en el titulo la palabra ‘silencio’ ya habla de lo que se calla, de la estigmatización” Nos explica ante el rechazo, el desconocimiento y miedo que generan las enfermedades mentales “También contamos que uno de los síntomas de esta enfermedad es que se oyen voces, y esas voces las representa Elvis” Personaje que habita en la mente del protagonista, interpretado por Martxelo Rubio ” y decir ‘el silencio de Elvis’ es luminoso si lo miramos desde esa perspectiva” .
El Silencio de Elvis nos invita a mirar y abrazar con empatía, rompiendo tabúes a golpe de ternura y sentido del humor “Cuando una enfermedad cae en una familia, cae sobre toda sus miembros” finaliza diciendo Pepe Viyuela “Entre todos se puede aliviar”.
Texto y fotos José Antonio Alba / @joseaalba
