El Teatro Lara y Juan Carlos Rubio se suman al Año Lorca con ‘Lorca, la correspondencia personal’

José Antonio Alba

El Año Lorca está dando mucho de sí y el mes de mayo promete no defraudar. Además del maratón preparado en Canal, llegará al Teatro Lara la premiada e intimista propuesta de Juan Carlos Rubio e Histrión Teatro: Lorca, la correspondencia personal. Una producción que quiere acercarnos al entorno más cercano del autor para descubrir y comprender las conexiones existentes entre su vida personal y su obra.

«El Teatro Lara no podía dar la espalda al Año Lorca comenta Antonio Fuentes, director del Lara “El estreno de Lorca, la correspondencia personal es también una clara apuesta por abrir nuestra programación a un tipo de teatro fuera de las líneas comerciales imperantes, con la calidad a la que nuestro espectador está acostumbrado y llevadas a cabo por compañías con una trayectoria profesional solvente” Nos explica acerca de este giro en la programación del teatro “Creemos que es necesario que los madrileños disfruten de este espectáculo emotivo de gran fuerza visual que viene avalado por la firma de Juan Carlos Rubio y la producción de Histrión Teatro. Una exquisitez para nuestra bombonera del Lara.»

Estrenada en el 2017, pero aún inédita en Madrid, Lorca, la correspondencia personal, utiliza el material epistolar hallado para adentrarnos en la intimidad del hombre que fue, más allá de su obra “Me fascina Lorca como escritor. Y me fascina Lorca como individuo” Dice Juan Carlos Rubio, autor y director del espectáculosu correspondencia personal es el puente perfecto que conecta al artista y a la persona, una exquisita colección de cartas que transita por lo cotidiano y lo onírico, por lo más querido y por lo más temido”. Un trabajo hecho en colaboración, una vez más, con Histrión teatro, compañía con la que ya trabajó en Arizona y con la que acaba de estrenar La Isla, su trabajo más reciente hasta el momento.

Un espacio escénico creado por Curt Allen Wilmer, recientemente nominado al MAX por Lehman Trilogy, que es una especie de limbo en el que reside la memoria conservada del autor, encontraremos a Gema Matarranz y Alejandro Vera que se ocupan de dar vida a Lorca, una dualidad más allá de generos, que nos conecta con el arte y la estilo de vida por el que se movía el poeta, para ir abriendo nuevas ventanas desde las que contemplar la inmensa, a veces parece que infinita, figura de Lorca en un intento por comprender una época y descubrir cómo conecta, desde un terreno más cotidiano, con su obra.80 años después de su muerte sigue siendo un gran desconocido” señala su director.

José Antonio Alba / @joseaalba

Fotos Gerardo Sanz

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