En ‘Mimesis’ el público se sitúa 360 grados alrededor de la acción, los bebés en el epicentro de la experiencia escénica.
La infancia es una rica y apasionante colección de «primeras veces» que van formando y conformando nuestra forma de ser y de relacionarnos con nosotros mismos, con el mundo y con quienes nos rodean. Y muchas de esas «primeras veces» van cargadas de emoción, asombro, planificación y acompañamiento. Mimesis es la propuesta de Zig Zag Danza para una «primera vez», de las más especiales para el futuro espectador o espectadora: una primera toma de contacto con el teatro, la danza, la música… Y es que el montaje teatral se plantea como un rito de iniciación, de bebés y familias, a las artes escénicas.
El concepto de mimesis tiene raíces latinas y griegas que hacen referencia a la imitación, reproducción o representación y fue objeto de «debate» para los dos filósofos más grandes de la Antigüedad, Platón y Aristóteles. El espectáculo que nos ocupa, de la compañía asturiana Zig Zag Danza, se construye en torno a la imitación como vía de relación con el mundo que nos rodea. Consiste en un ritual, una representación, un juego de comunicación y experiencia compartida a través de la imitación con varios elementos esenciales: la música, las imágenes y el movimiento. Una propuesta original, muy cuidada y respetuosa con el público más joven (de 0 a 3 años) y sus familias.
En Mimesis, la acción se desarrolla en un escenario inusual. Tiene forma de esfera pero es un espacio vivo, dinámico, en transformación, que cambia a merced del sonido y el movimiento de cuerpos, objetos y proyecciones a través de vídeo-mapping. El tradicional patio de butacas se moldea para que los espectadores, bebés y familias se sitúen 360 grados alrededor de la acción. Cada familia es acompañada individualmente por los intérpretes a modo de invitación al rito de iniciación. Una vez allí, disfrutarán de una experiencia visual y sensorial única y tendrán la oportunidad de sentirse parte del espectáculo porque una vez termine, serán los espectadores quienes exploren y experimenten, de forma libre y autónoma, a partir de lo que han visto.
El público es invitado a participar y transformar el espacio escénico de ‘Mimesis’ en función de lo que han visto representado.
Como explican en Zig Zag Danza, compañía dirigida por Estrella García y Miguel Quiroga, «todo el espacio es voluble y cambiante, todo el concepto estético de la propuesta se basa en el movimiento: objetos, imágenes e intérpretes interactúan para generar una propuesta dinámica que invita a la atención y la concentración. El rito nos habla de compartir y esto nos lleva al círculo y a la curva como ejes vertebradores de toda la propuesta. La vida no es una línea recta sino una sucesión de curvas». Los creadores de este montaje se han convertido en un referente de las artes escénicas para la primera infancia, tras dos décadas de investigación sobre movimiento y teatralidad y la construcción de universos que tienen como protagonistas la luz, el lenguaje del cuerpo y los espacios sonoro y escénico.
¡Bienvenidos a Mimesis!
La música, elemento clave en Mimesis, está compuesta y dirigida por Miguel Pérez Iñesta (clarinete y director musical) y por la violinista Emmanuelle Bernard. Los músicos residen en Alemania pero están presentes y se integran en la representación mediante una proyección sobre tres grandes esferas que flotan sobre el espacio. La pieza está dirigida por la coreógrafa Estrella García (Premio Asturias de las Artes Escénicas 2004, Premio Oh! 2013 y Premio FESTIN 2016). Zig Zag Danza participa habitualmente en programaciones de festivales dedicados a la infancia y colabora en proyectos con otras compañías, instituciones y artistas pero cuenta con una veintena de producciones y coproducciones, dirigidas tanto a público adulto (Portrait, Disonancias V18, Helladia o los cuerpos de Atalanta, Después de cortar el césped…) como familiar (Mimesis, Aupapá, Formas, Jardín secreto…)
Quienes tengan el privilegio de disfrutar de Mimesis, (doce familias por representación) asistirán a una cuidada producción internacional de más de tres años realizada entre España y Alemania. Una de esas «primeras experiencias» para recordar en familia. El domingo 29 de octubre se representa con doble función en la Sala Cuarta Pared de Madrid.
