Esta temporada el teatro musical está siendo uno de los géneros más destacados en cuanto a títulos estrenados. Desde que iniciamos la andadura de esta temporada, no han dejado de llegar nuevas producciones de gran formato que han arrastrado al público a los teatros, pero en el musical no todo son marquesinas de neón con nombres conocidos, también hay otras compañías que, contando con muchos menos medios, ponen al servicio de sus espectáculos toda la imaginación y talento para sacar adelante montajes que siguen poniendo de manifiesto el estupendo estado de salud del que goza últimamente el género.
Uno de esos casos de los que hablamos es Una corona para Claudia, un espectáculo ideado por Iker Azkoitia que quizá al grueso del público no le suene demasiado y que, sin embargo, en estos días inicia su cuarta temporada desde el Teatro Lara. Una producción de SerieTeatro que nació gracias a la residencia artística ofrecida por parte de Arte4 Estudio de Actores, nombre tras el que se encuentran Ramón Quesada y Claudio Sierra, que pusieron todos los medios que tenían a su alcance para que esta compañía, al igual que otras tantas que han podido beneficiarse de esta residencia, pudieran crear y sacar adelante este espectáculo que ya es un viejo conocido de nuestra cartelera.
Una corona para Claudia es un musical de creación propia, con libreto de Iker Azkoitia, quien junto a Ricky Fan firman la música original de las 14 canciones tocadas en directo de este espectáculo en el que, a través de referencias tan reconocibles como BlaBlacar o la fiebre por las series de televisión, construyen esta historia en la que unos amigos se marchan de acampada para superar el mal momento sentimental de uno de ellos. Gracias a un apagón digital y la aparición de Claudia su forma de ver la vida dará un giro inesperado.
Una tragicomedia de mensaje positivo que nos habla de la reafirmación de la propia identidad, de perseguir los sueños y enfrentarse a la madurez. Una propuesta que nos plantea el desencanto de una generación a la que se le ha venido todo encima y de la que casi nadie espera nada, pero que, sin embargo, pelea por hacerse su propio hueco. Un retrato repleto de canciones pegadizas y de diálogos ocurrentes que mezcla la emoción con momentos realmente hilarantes, que nos ofrece una nueva visión sobre quiénes son los jóvenes de hoy en día, sobre cuáles son sus preferencias, las carencias que acusan y sus anhelos.
Una corona para Claudia, interpretada por Eva Ramos, Laura Ledesma, Iker Azkoitia, Jaime Riba/Juan Jesús di Manuel y Ricky Fan apuesta por la cercanía con el público, ofreciendo una propuesta desprovista de grandes artificios que pretende que su historia cale a través de las interpretaciones, apoyándose en los actores e intentando lograr que el musical deje de ser considerado como el “hermano menor” del Teatro.
Texto José Antonio Alba
