En Zambra de la buena salvaje se entrelazan danza, humor e irreverencia en un monólogo coral donde lo salvaje se traduce en un acto de resistencia colectiva. Un espectáculo que baila con la bestia, que se abre paso entre los escombros de la norma y que, sobre la tierra removida, siembra un mundo nuevo. En la Sala Teatro Cuarta Pared.