La Patética se inspira libre y remotamente en Morir, la novela de Arthur Schnitzler. La obra es un viaje enajenado entre la realidad y la ficción. Los delirios hilarantes de un hombre que se revuelve ante la tragedia de su propia extinción. Una comedia con un protagonista trágico decidido a que el final de su vida tenga como banda sonora el sublime arrebato emocional de la famosa Sinfonía de Tchaikovsky.
Sinopsis
Madrid 2025. Pedro Berriel, un director de orquesta de 53 años, se encuentra inmerso en la grabación de la Sinfonía Nº 6 de Tchaikovsky. Tan concentrado en su tarea que asume con naturalidad que el compositor ruso siga con atención los ensayos a su lado. Pero tal vez, la verdadera razón de este delirio sea que el director se encuentra en la fase terminal de una terrible enfermedad. La angustia por culminar la obra artística que, de alguna manera, suponga una resistencia a su propia muerte se mezcla con la angustia real que esta le produce.
Jon, el marido de Pedro, lo fuerza a seguir el tratamiento médico sin rendirse ala desesperanza a pesar de que la agresividad del mismo imposibilite su empeño artístico. En un momento en el que parece que su estado mejora, y preso de una arrolladora energía vital, Pedro decide aceptar la invitación del Concurso Internacional Tchaikovsky para dirigir La Patética en Moscú durante la gala de clausura. El presidente Putin será la autoridad que presida el evento. Pedro concibe una idea: si finalmente no puede terminar la grabación destinada a convertirse en su legado artístico, al menos intentará llevar a cabo una acción frente al homófobo presidente que haga que su dirección en vivo de La Patética pase a la historia. Aunque no sea precisamente historia del arte.