Houdini, un musical mágico combina lo mejor de los grandes musicales, con impresionantes números de magia y toques de cabaret, todo ello para contar la vida del ilusionista más grande de todos los tiempos, Harry Houdini, encarnado en Pablo Puyol.
Tengo que reconocer que acudí al musical con poca información sobre la vida de Harry Houdini, pero salí de él con intriga y ganas de conocer muchos más detalles sobre una vida tan apasionante. Me encantó la estructura narrativa del espectáculo para contar la vida del famoso ilusionista, a base de constantes saltos en el tiempo algo que, en el cine es sencillo, pero en el teatro se torna mucho más complejo y que el musical Houdini salva con maestría.
Sin embargo, lo que más me fascinó del espectáculo es la maravillosa combinación de género musical y espectáculo de magia, dos disciplinas que, a priori, pueden parecer muy diferentes, pero que en Houdini, un musical mágico maridan como un buen tinto y una buena carne. Este matrimonio tan bien avenido es fruto de un reparto de gran calidad vocal e interpretativa, encabezado por Pablo Puyol como Harry Houdini, que igual desaparece del escenario apareciendo en el patio de butacas que se cuelga boca abajo y se quita la camisa de fuerza, mientras entona uno de los temas del musical con notas de auténtico tenor. Impresionante.
Julia Möller interpreta a Bess, la mujer de Houdini y Christian Escuredo, a Theo, su hermano, ambos soberbios en sus papeles. No obstante, el papel que más me impresionó por su originalidad fue el de la muerte, personificada en Juan Dos Santos. La muerte es un personaje más que pasea a sus anchas por la vida de Houdini. Y es que el ilusionista la desafiaba con cada «más difícil todavía». Llega un momento en el musical que hasta Harry baila literalmente con ella, un bonito poema.
La iluminación juega un papel fundamental en este espectáculo y también la escenografía que invade todo el Teatro Calderón en una experiencia inmersiva que el público puede vivir desde una hora antes del comienzo de la función.
Houdini, un musical mágico es un planazo para «escapar» de la rutina y dejarse envolver por la magia de la música.
