La desgarradora historia de Florian Zeller, ‘La Madre’, llega al Teatro Pavón de la mano del director Juan Carlos Fisher en forma de un poderoso montaje que nos transporta a esas historias de abandono del hogar, de nidos vacíos, de mujeres que lo han dado todo por sus familias y que, de repente, se encuentra solas ante el mundo cuando el núcleo comienza a dispersarse. Esta madre, Anne, a quien da vida Aitana Sánchez Gijón, se da cuenta de que su vida ha consistido en dedicarse a los demás, a su trabajo, sin haber tenido tiempo para cultivar sus propios intereses. La enfermedad de la soledad le acecha como un monstruo imaginario que puede sumirla en una profunda depresión.
Una magnética, vulnerable, portentosa, bellísima Aitana Sánchez Gijón, que vuelve a reafirmarse como una de las mejores intérpretes de nuestro país, es (prácticamente) la protagonista absoluta de esta historia. La actriz se entrega por completo a este personaje y lleva a los espectadores a través de su viaje emocional interno, en ocasiones impregnado de comedia y humor negro, en otras completamente devastador. Alex Villazán, Juan Carlos Vellido y Júlia Roch la acompañan en el escenario de manera sobresaliente. Es imposible no empatizar con el personaje de Anne (pese a las extremas palabras que pueda llegar a pronunciar), imposible no acordarse de la infancia de uno. ‘La madre’ remueve y sacude corazones y memorias, y ya se ha convertido en uno de los montajes del año.
