César Barló: “No es lo mismo cuando te pegan en el corazón que cuando te seducen el cerebro”

José Antonio Alba

Quedamos con César Barló, director de AlmaViva Teatro, para hablar sobre El Estado de sitio, su estreno más reciente inspirado en la obra de Camus; y lo hacemos en La Puerta Estrecha, espacio donde podrá verse hasta mediados de mes, sin opción de prórroga, al menos de momento. “No sabemos qué pasará, pero el propietario quiere vender el local”, nos dice al preguntarle por el anuncio del cierre de esta sala tras 15 años de andadura, otra víctima más de la fiebre especulativa que está apoderándose de la ciudad de Madrid. La noticia saltó hace pocos días “No sé si tendremos el mes de enero también y luego buscar otro sitio y seguir” nos cuenta con resignación, aunque con el espíritu combativo del que no se rinde.

AlmaViva Teatro, con César Barló a la cabeza, defienden el Off como sinónimo de una mirada alternativa, en pro de la creación e investigación y que pretenden que, más allá de la precariedad, resulte estimulante tanto para el espectador como para los artistas que lo llevan a cabo. Así nos lo han demostrado con montajes como Don Juan en La Cebada que peleó por preservar la tradición del Tenorio en la capital, ofreciendo una visión renovadora con aires de espectáculo de gran formato – Quien lo vivió lo sabe- o la desgarradora versión de su Fuenteovejuna; e incluso viniéndonos a la temporada pasada, con sus montajes más recientes, que demostraban que son capaces de agarrarte de las tripas con un Koltès tan intimista como La noche justo antes de los bosques o, fascinarnos como a niños pequeños, marcándose una premiada producción de La Tempestad en plan experiencia inmersiva, que ya hubiesen querido para sí muchos teatros institucionales.

EL ESTADO DE SITIO CONTRA EL “NO PASA NADA”.

“La desesperación no viene a partir de una lucha épica, o mastodóntica, o de la desigualdad de los que luchan; la desesperación viene en el momento que no sabemos si hay que luchar” Una afirmación contundente que Barló ha incluido en el programa de mano como leitmotiv de El Estado de sitio, una cita que hace que se ilumine la cara del director “¡Él es un vitalista absoluto!” proclama con entusiasmo sobre Camus, de cuya vida y milagros se ha empadado durante el proceso de creación, “lo que pasa que ve la realidad”, una realidad de la que el director saca una conclusión: “Estamos desenfocados” y no solo habla de la situación del teatro, del que nota “una ferocidad enorme” debido a la presión “Todo parece que tiene que ser un éxito” algo que para el director “no tiene que ver con el teatro, ni con el hecho que compartimos, ni con el público ni con los que lo hacemos. Está flotando como por fuera (…) todo el mundo tiene que ascender. Tienes que tener una notoriedad y llegar a no sé qué teatro porque si no, no eres nadie. Como si tuviera algo que ver el hecho de estar en un teatro u otro para hacer una cosa buena”.

Ese mismo desenfoque lo aplica a la sociedad y es lo que ha querido retratar en escena “Es una pieza muy contemporánea en ese sentido. Comienza con un pueblo que dice ‘No pasa nada, todo está bien’”, una situación absolutamente vigente, no hay más que mirar las noticias, y que Camus ya planteaba en los años 40 “No aprendemos” afirma Barló “Esta no es una peste violenta, de sangre, como en la novela o en la pieza de teatro. Ahora es un magma muy sutil que se te cuela y no te das cuenta” y señala el que es para él el El Estado de sitio actual “Desde el propio Facebook, que nos censura por poner un pecho, hasta nuestra propia autocensura” nos dice “No puedes decir las cosas claras. Estamos en la polaridad, o estás en un sitio o estás en otro”.

UNA OBRA COMPLEJA PARA TODO TIPO DE PÚBLICO

Llegados a este punto de la charla le preguntamos por el montaje y a César Barló se le dibuja una sonrisa divertida recordando el primer pase con público de la función, destinado a personas ajenas a la profesión “que ya sabemos que algunos vienen con los cuchillos afilados y solo era un primer pase”. Recuerda el encuentro posterior a la representación donde su hermana, quien ha estado llevando la comunicación de la compañía durante mucho tiempo y, según César, es su crítica más “feroz”, le dijo: “Ya era hora que hicieras algo para el público y no para cuatro eruditos”, un comentario que el director recibió con alegría “hemos dado con el tono” porque para él la clave está en agarrarnos de las tripas, dejando el intelecto aparte “No es lo mismo cuando te pegan en el corazón que cuando te seducen el cerebro” y señalándose el estómago nos dice «Todo se hace para la intelectualidad, ya no agredimos aquí».

El Estado de sitio es una obra que supone un reto creativo para AlmaViva “Camus plantea una obra que transita en varios códigos de representación. Es un poco esquemática. Se quedó en algo de retablo de todo ese mundo de imágenes de lo que nos sucede en el día a día” aunque esto no les acobarda “La propuesta es arriesgada. Va en el espíritu de la compañía” afirma su director con la convicción del que se ha embarcado en una empresa compleja por voluntad propia “Es como para hacer un operón”.

EL OFF ESTÁ PARA HACER UN TEATRO ALTERNATIVO

Le pedimos que nos cuente más detalles sobre lo que veremos cuando acudamos a La Puerta Estrecha “Hay una amenaza que viene, un cometa, como augurio de que algo malo llega. Los poderes públicos dicen que no pasa nada y el pueblo lo cree, ¿Qué podría ser eso en nuestra época?” y lo deja en puntos suspensivos porque no quiere destripar nada “Son siete actores y un elemento sorpresa que es novedoso…” y ahí lo deja. Esos siete actores que forman parte del entramado son Adrián Viador, Teresa Alonso, José Gonçalo Pais, Eva Varela Lasheras, Diego Ercolini, Sayo Almeida y Samuel Blanco, además de los espectadores que, como es habitual en los montajes de AlmaViva “La gente participa”, avisándonos de que el público adopta el papel del pueblo.

Raúl Iaiza como asesor del coro griego, Mamen Agüera como asesora de movimiento, Karmen Abarca en el espacio y vestuario y Lisi Búa con el espacio sonoro, forman el resto del equipo, junto a Rodrigo Manchado, compositor de la canción que escucharemos durante la función, tristemente desaparecido durante la creación de El Estado de sitio “Rodrigo me acompañó en el Don Juan, en la Tempestad… le hacemos un homenaje”.

Un equipo enorme, algo habitual en la compañía, que César nos explica “El Off no puede ser cutre” nos diceEl off tiene que definirse en que tiene que haber una alternativa escénica del hecho teatral con las condiciones que tengo» y aprovecha para lanzar un mensaje a aquellos teatros comerciales y artístas que ponen la etiqueta «Off» a sus creaciones de bajo presupuesto“No me sirve decir ‘Hago una propuesta off en un teatro institucional’. Si tienes una propuesta off, tío, ¡vente al off!” Quizá sea esa la clave, abrir un diálogo artístico que convirtiera el circuito teatral en un conjunto de vasos comunicantes. Mientras, a la falta de medios, ellos le echan imaginación “Que no parezca que nos falta imaginación”, un mantra que se ha repetido a sí mismo durante el proceso creativo.

EL MIEDO Y EL AMOR, DOS CLAVES QUE LO PUEDEN TODO

“Lo que plantea el texto es un viaje de aprendizaje” reflexiona Barló, que en todo momento ha querido ajustar la propuesta a nuestra realidad para apelar de manera directa al público “Creo que en el mundo cada uno tiene que hacer lo que puede para intentar mejorarlo, sin ninguna vanidad” Una línea de pensamiento compartida con Camus que AlmaViva aplica desde el teatro “lo hacemos desde lo que sabemos (…) hay que pensar en el bien común sin perder nuestro lugar”.

Y finalizamos nuestra conversación con César Barló manejando los dos grandes conceptos desde los que está construida El Estado de sitio, el Miedo y el Amor “Son las dos palabras que mas se repiten en el texto” Una batalla a brazo partido por lograr que la luz prevalezca “una lucha entre el miedo y el amor. El miedo que nos paraliza y el amor con mayúsculas Si tenemos amor a la vida podremos decir las cosas como las tenemos que decir, sin esta cosa de la autocensura que decíamos ¡Ese es el amor que podrá liberarnos!”.

Con ese mensaje lleno de positivismo ante la adversidad que nos contagia AlmaViva Teatro y las ganas de seguir encontrando motivos por los que luchar que proclama Camus, es con lo que nos quedamos.

Texto José Antonio Alba

Escrito por
Artículos relacionados
Violencia

Violencia

Según los últimos barómetros del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) en 2024, los principales problemas que preocupan a los españoles han cambiado considerablemente en los últimos meses. Actualmente, la inmigración […]

Comentarios
Sé el primero en dejar tu comentario
¡Enlace copiado!