‘Troyanas’ alza la voz contra la represión de las víctimas femeninas de la guerra

José Antonio Alba

Este mes de noviembre llega la primera producción propia del Español para esta temporada: Troyanas. Una puesta en escena que cuenta con la dirección de la propia Carme Portaceli, con Aitana Sánchez-Gijón, Ernesto Alterio, Alba Flores y Maggie Civantos al frente del reparto y con Alberto Conejero firmando la adaptación del texto de Eurípides.

Una versión actualizada del texto que deja a un lado el artículo del título original –Las Troyanas– con la intención de no hacer referencia únicamente a las mujeres víctimas de la guerra de Troya e incluir, según Portaceli, a “Todas las mujeres que, incluso hoy en día, siguen padeciendo el ser repartidas y consideradas como un botín de guerra (…)y de aquellas personas que siempre han hecho la resistencia, han estado ahí, han luchado por la dignidad, por sus hijos, por ellas y por los demás”. Un texto que sitúa a Eurípides, teniendo en cuenta la época en la que escribió Troyanas, como un autor tremendamente transgresor, dignificando la figura de la mujer y situándola como centro de la historia. “Gran gesto radical y kamikaze como dramaturgo” apunta Alberto Conjero.

Una elección para llevar a escena realizada por Carme Portaceli que sobrecoge por la proximidad que posee con nuestro presente, haciendo referencias directas y creando un paralelismo tremendamente certero entre dos épocas separadas por tantos siglos de diferencia. Los refugiados, la trata de blancas, las recientes denuncias por abusos sexuales por parte de personalidades, la destrucción del patrimonio cultural del vencido… temas que sorprende encontrar en un texto escrito hace tanto tiempo y que, tristemente, posea tanta vigencia. Alberto Conejero ha querido acercar las palabras de Eurípides a nuestro presente como “un canto a la fortaleza, a la resistencia, y, sobre todo, a que no se le quite el relato a aquellos que tienen que ser escuchados” y ensalza la valentía del autor para realizar un ejercicio de autocrítica tan contundente como Troyanas “Eurípides decía: ‘Esta es la Iliada, estos son nuestros mitos fundacionales, estos son nuestros héroes, fijaos cómo eran y lo qué han hecho’ (…) Un gesto tan radical y valiente que uno se siente chiquito al lado de un hombre que levanta esta especie de Guernica que se hace carne a través de los actores”.

Troyanas llega al Teatro Español tras su paso por algunos de los grandes festivales de verano como Mérida, el Grec, San Javier o Sagunto. “Es bonito ver cómo haciéndolo en los espacios cerrados los colores se matizan. Ahora ha tomado más intimidad sin perder los grandes temas que trata” Comenta Alba Flores ante la llegada del montaje al Teatro Español, señalando el cambio del tipo de escenario donde se representará a partir de ahora.

Una puesta en escena que como dice Aitana Sánchez-Gijón “Está hecha desde lo esencial, con seis actrices y un actor. Hemos entrado en un terreno no realista, más conceptual, con un trabajo de cuerpo determinado y una propuesta un poquito más abstracta”. Una propuesta de la que Ernesto Alterio destaca “Para mí una de las cosas más interesantes ha sido encontrar este lenguaje que sea capaz de comunicar la altura y la profundidad poética que tiene este texto”

Troyanas nos insta a levantar la voz frente a la injusticia y la represión. “No podemos permitir que la injusticia siga en silencio y se queden con toda la luz del mundo” dice Aitana Sánchez-Gijon parafraseando a su personaje, Hécuba, en su monólogo final.

Texto y Fotos José Antonio Alba

Escrito por
Artículos relacionados
Comentarios
Sé el primero en dejar tu comentario
¡Enlace copiado!