Locos por el diván

Esta obra surge como una crítica feroz a la televisión amarillista que hará lo que sea por ganar audiencia. Un doctor en psiquiatría pasa consulta en directo a sus clientes enseñando a todos sus espectadores sus miserias y su dificultad en el día a día. El doctor no se preocupa por sus pacientes, solo le interesa vender el drama humano al público. A pesar de este planteamiento tan amargo, la compañía Nada Corriente lleva a cabo una comedia fantástica, que como toda buena comedia, está basada en un verdadero drama. Toca todos los aspectos malos de la televisión, la falsedad, el maltrato, el sexismo, etc.

Encantado me quedé con Luis León, que encarna a un paciente con un retraso general no especificado. Su trabajo me parece muy afinado en el sentido de que conjuga bien el respeto a las personas que sufren de esta condición, y, a la vez hace un personaje cómico que en numerosas ocasiones arrancaba fuertes risas por parte del público. Es muy difícil y requiere un gran trabajo y un absoluto respeto hacer este trabajo, y este gran actor sale airoso del paso. Laura Cámara hace un gran trabajo escénico, al mantenerse en personaje toda la obra, y, además dándole matices estupendos que revelan la psicología del personaje. Tiene un monólogo al final, que solo por escucharlo ya merece la pena ir. El resto del equipo trazan un conjunto de personajes curiosos e hilarantes que lo dan todo bajo la batuta de Dani Jara.

Esta es una comedia realmente divertida y con un fundamento. Esta compañía no deja un cabo suelto y, aparte de hacerte reír, te manda un mensaje y una crítica. 100% recomendable.