Imposible no recomendar Mamma Mia a todos quienes quieran pasar un muy buen rato y salir más alegres de como entraron. Éxito garantizado, también en esta producción, que a mi entender no mejora a la que ya conocemos. Uno de los pocos musicales jukebox (a partir de canciones ya existentes, habitualmente de intérpretes de éxito) donde el libreto de Catherine Johnson no está metido con calzador y encaja perfectamente con las conocidísimas e imbatibles canciones -más complejas de lo que parecen-.
Leo que es la primera vez que se permite una adaptación nueva, diferente de la franquicia -musicales que se representan exactamente de igual manera en diferentes lugares- que se originó en Londres en ’99 y llegó a España en 2004. La verdad es que yo prefería el original. Y no es pataleta por haber cambiado algo que ya conocemos si no que no me ha parecido que las diferentes novedades, salvo la preciosa ambientación del teatro y las magnificas coreografías, mejoren lo anterior. El vestuario, por ejemplo, no tenemos los monos icónicos, los vestidos finales son casi futuristas y oscuros, tono este por el que parece haber apostado en demasía el diseño de producción: la pesadilla tiene demasiado de expresionismo, en la orquestación y arreglos predominan los bajos, un sonido grave, los decorados no transmiten la luz que esperamos de una isla griega, hasta la escena en la playa parece trascurrir en un nublado día. Las coreografías, en cambio, aportan muchísimo dinamismo, tremendamente «expresivas» y físicas, tanto que encajarían perfectamente en otro tipo de musical más «dramático» o «adulto», mientras sonríen tan exageradamente que no transmiten el buen rollo deseado y algún miembro del cuerpo de baile acaba molestando al querer destacar exagerando aún más movimientos y expresiones. Se han cambiado también las letras, cosa que no entiendo cuando tienes a parte del público que se las sabe y les frustras esa experiencia inmersiva. A nivel interpretativo, correcto, con algunas voces, justitas, donde destaca Gina Gonfaus (Sophia).
Dicho esto, Mamma Mia, también esta adaptación, es una producción muy recomendable que funciona y muy bien.
Lo menos mejor: el público, que se comporta como en un concierto tributo en vez de en el teatro.
Lo mejor: las buenas vibraciones y alegría con la que sale el público. Y el libreto, la capacidad de crear una historia interesante donde encajen bien las canciones ya existentes. Muy, muy difícil.
Disclaimer: ABBA me acompaña en mi día a día desde hace más de 40 años, incluyendo aquellos donde decir que te gustaban generaba miradas de desprecio.
