Somos relato y la fábula es nuestro motor de vida. Los recuerdos y los deseos confeccionan lo que fuimos, somos y llegaremos a ser. Todo es real a partir de la ficción. Esa es nuestra catástrofe individual y también colectiva. La propuesta escénica del dramaturgo Antonio Rojano con Íñigo Rodríguez-Claro a la dirección nos invita a presenciar los accidentes que anidan dentro de los anhelos de lo que pudo haber sido en las vidas de Ion, Mikele, Irene y Jota. Cuatro intérpretes recorren el imaginario de sus ficciones adentrándose en un desierto que les conduce al borde del infortunio: ese punto crítico en el que la fábula se agota y con ella la vida. En ese árido océano, la presencia […]