El actor y director repite la aventura de liderar un gran musical. Este año el multipremiado The Producers llega al Teatro Nuevo Alcalá con el sello humorístico de Mel Brooks y una espectacular puesta en escena. Nos colamos en el camerino de Àngel Llàcer, cinco minutos antes de empezar la función.
Imagen de ‘The producers, el musical’ de Àngel Llàcer y Manu Guix
Teatro Madrid: ¿Algún ritual antes de salir?
Àngel Llàcer: Siempre intento coger la energía positiva… Hablo con la gente, hacemos piña. A La jaula de las locas le decíamos “el atún”.
¿«El atún»?
Antes de empezar la función, cantábamos como locas canciones de Chenoa y de Bisbal, de Gloria Estefan, de Mónica Naranjo… Nos tocábamos, bailábamos y cuando ya teníamos toda esta energía, empezábamos el espectáculo. “¡Pim, pam, pum, bocadillo de atún! Todo tiene que ir con ritmo, ¡no hay tiempo para nada! ¡No pienses!”. Es algo con el espíritu con el que dirijo.
¿Todavía lo hace en The Producers?
Como yo tengo un personaje secundario, estoy relegado aquí en el último camerino, solo, lejos de todo el mundo, no puedo encargarme de cohesionar. Siempre digo que debe haber un líder. Cuando hicimos Cantando bajo la lluvia, le dije a Iván Labanda: “Tú debes hacer de Don Lockwood, pero también debes cohesionar”. Y ahora le digo a Armando Pita: “Debemos ser líderes, somos un equipo”. Y lo hace él.
Es una responsabilidad liderar un musical que ha costado 2,7 millones de euros.
No hay otro musical que se haya hecho en Barcelona que haya costado ese dinero. Es el espectáculo más ambicioso jamás realizado. Todo lo que hemos ganado con los espectáculos anteriores lo hemos invertido para hacerlo.
«El éxito para mí es que la persona que se sienta en la butaca salga feliz»
¿Cuándo tuviste tu primer momento “Ser productor es mi sueño”?
Nunca. Yo soy productor por casualidades de la vida. Donde soy productor está en El Petit Príncep, desde hace diez años, y ya tengo suficiente. Prefiero ser director, crear equipos… Hace cinco años empezamos a hacer musicales y no sabíamos. Ya hemos aprendido.
¿Qué consejo le darías a ese Ángel?
Ángel de hace cinco años era mucho más sabio que el de ahora, era más valiente, con más ganas de salir adelante, sin preguntarse nada, sin juzgar nada, era un tipo mucho más… valiente de lo que soy ahora. De hecho, necesitaría que el Ángel del pasado viniera a mí y me diera algún consejo. ¿Sabes? La edad no es un grado y no sirve de nada, es una mierda hacerse mayor. Ahora me apetece más descansar.
Àngel Llàcer. Imagen: David Ruano
En estos años has acumulado muchos logros.
Sí, puede. Pero también con trabajos que voy arrastrando. El Petit Príncep cumple diez años. Ahora tenemos esa factoría de musicales con Nostromo Live. Hace cinco años no pensaba que seguiríamos haciendo musicales y con previsión de hacer más. En Tu cara me suenahace doce años que voy. Las grandes cosas que yo hago las voy arrastrando del pasado.
Escoger musical para levantar su producción debe ser difícil. ¿Qué le inspira?
Yo veo que Nathan Lane siempre ha estado muy presente en todos los espectáculos que hacemos. Creo que debemos tener más o menos el mismo criterio, nos gustan los mismos musicales. Además, los dos buscamos que podamos realizar el espectáculo a nuestro modo, que no sean una franquicia. La copia no me gusta. Aunque con El Petit Príncep tengo una franquicia y cuando lo llevamos a otros países pido que lo hagan exactamente igual. Les hago hacer lo que no me gusta que hagan conmigo.
Àngel Llàcer en ‘The Producers’
El sello Llàcer-Guix es ya una garantía.
La jaula de las locas es muy divertida, tiene ese humor descarado, personajes cómicos, y Cantando bajo la lluvia tiene la espectacularidad, los grandes números musicales… Cuando escogíamos qué hacer, pensamos: “Si los anteriores nos han salido bien, sumamos y saldrá recibido”. Hacer The Producers era lo más natural.
En The Producers interpretas un director al que acusan de frívolo.
No le he añadido yo este texto, es original de la función. Hay un momento en que me dicen: “La gente tiene la sensación de que nunca te han valorado porque haces entretenimientos banales”. Yo respondo: «Ah, cuánta razón tienes», y rico. Claro, realmente es mi vida, porque yo siempre he dado esa imagen que he hecho entretenimientos banales. Mucha gente me valora, o menosprecia, precisamente por haber hecho estos entretenimientos banales durante mucho tiempo, que para mí no son nada banales, pero bueno. Al final siempre tienes que amar a tus personajes. Además compartimos leitmotiv para dirigir: “Ponle plumas y así brillará”. Y también purpurina. Pero ahora le han prohibido y creo que esto será el final de nuestros espectáculos. Europa no sabe lo que acaba de hacer, prohibiendo la purpurina.
¿Qué espectáculo tienes ganas de representar?
Ya sé que queda muy raro, pero a mí me gustaría interpretar de nuevo La jaula de las locas.
¿Pasará?
Pasará.
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